Volvimos a jugar a ser libres y salimos a cumplir una obligación ciudadana de participar en el proceso electoral votando.
Salimos con la confianza de hacer lo correcto, de elegir a nuestros gobernantes, de buscar a través del voto que tuviéramos autoridades que sepan conducir nuestros municipios, nuestros estados y nuestra Nación al bien común.
Y en lo personal me encuentro con grandes sorpresas ese domingo: No se respeta a la autoridad electoral, ellos pidieron que nadie saliera a declarar triunfos que ellos lo harían, pero el PRI y el PAN a través de sus candidatos salen de manera anticipada. Sorpresa no por el triunfo de AMLO sino el carro completo como en las mejores épocas del PRI lo cual confirma que hubo acuerdos serios y se formó el PRIMOR.
El porcentaje de participación fue del 63.4% según reporta el PREP yo esperaba más o menos esas cifras que no son las mejores históricas ya que en 1994 fue del 77.1% y en el 2000 64%. Aunque sí es el candidato con la votación histórica más alta de México para ganar la presidencia.
Es aterrador la manera que el encono y la poca reflexión hicieron votar a millones, estoy de acuerdo en que confiaran y creyeran que el Mesías AMLO era la solución y que podría cumplir sus promesas de campaña, aunque en muchas de esas promesas lo que predominó fue la ambigüedad, o sea decir a cada sector de la población lo que quería escuchar. Pero lo inverosímil del caso es el voto en cascada para elegir legisladores, gobernadores, ayuntamientos. No se pusieron a pensar ni un momento que no todos son AMLO y no todo es la Nación. Podrán decir le dimos el poder absoluto porque confiamos en él y para que no tenga pretextos de cambiar. Muy temerario el asunto.
Además de que el poder absoluto degenera en soberbia y dictadura, otra duda nos debe de asaltar ¿Tiene AMLO y su Movimiento la suficiente gente con capacidad y honestidad para los cientos de miles de cargos federales y estatales que deben cubrir? Nos presentó según él y otros “expertos” un super gabinete, pero en los estados que ganaron no sabemos nada de los super gabinetes y en general de los que ocuparán puestos de sub secretarios, directores, delegados, Titulares de dependencias como el IMSS, ISSSTE, PROFECO, PRODECON, CONDUSEF etc.
Con un Congreso a modo y las tentaciones de ser el super presidente AMLO puede cambiar las leyes que quiera e incluso puede hacer lo necesario para cambiar la Constitución sin mayor contrapeso. ¿Qué pasa si cambian la Ley de Coordinación Fiscal para favorecer a las entidades que ellos gobiernan y garantizar triunfos futuros? ¿Serán capaces todos esos actores de escuchar las voces ciudadanas, críticas, reclamos y observaciones de expertos para no meterse en la autonomía de los órganos que la tienen o de estados y municipios?
Lo que no sabemos con certeza los mexicanos es el tiempo que debemos esperar para ver los cambios, para sentir que ya se cumplen las promesas de campaña. Lo que sí sabemos es que sigue con algunas necedades como vivir en su casa, no tener seguridad, quitar el Estado Mayor Presidencial. Sobre éste tema ya escribí de la importancia del mismo, pero su capricho es grande. No sabemos si quitará también las pensiones millonarias a los ex Ministros de la SCJN. Y temas que dan miedo de cambio como en las reformas estructurales que la puede tirar de un dedazo, perdón de un plumazo.
Claro que debemos respetar la investidura presidencial, aunque él nunca respetó esas investiduras en el pasado, claro que debemos trabajar como ciudadanos para que le vaya bien en su gobierno y le vaya bien a México, claro que debemos alzar la voz cuando no estén saliendo las cosas como deben ser para el bien común, pero también es claro que él debe trabajar mucho para unir a un país que él dividió, debe trabajar para quitar el odio y resentimiento que él generó. Debe trabajar con sus gobernadores y legisladores de MORENA para evitar las revanchas. Debe controlar a la ciudadanía que él levantó para que no haga desmanes.
Hago votos para que no caigamos en una dictadura personal o de partido como en los tiempos del PRI y que en los próximos comicios los mexicanos votemos por el bien común.
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