Queremos mejores partidos, queremos mejores políticos pero hace falta más ciudadanía comprometida y menos quejas de mesas de café.
“Cuando los ciudadanos dejan de prestar atención por la política llegan a las instituciones políticos que no prestan atención a los ciudadanos, y eso es muy malo para la democracia”, Rosa Diez.
Hoy en México estamos viviendo una parte de la historia que quisiéramos cambiar, quisiéramos revertir el rumbo que llevamos por tanto enfrentamiento, tanta mentira, tanta demagogia. Desde la Presidencia de México se ha iniciado una confrontación entre los mexicanos. Estamos viviendo momentos nunca antes vistos por la egolatría de una persona. Para poder hacer un balance real es importante estar bien informados de lo que pasa, de lo que ha pasado y todo eso a donde nos puede llevar.
Cuando se escribe o se comenta algo sobre la situación de la Nación, sobre la política pública, las decisiones de los que gobiernan lógico cada quien lo hace desde su punto de vista, pero ese punto de vista no es solo por el capricho de una ideología, por la revancha o por atacar solamente. Esa opinión está basada en los hechos que se viven. No se trata solo de convencer para vencer, se trata de buscar el Bien Común a través de generar los cambios necesarios.
La libertad y la autonomía ciudadana mucho dependen de que no se depende del gobierno y mucho menos que se le debe algo. Esto es importante tener en cuenta por los programas sociales que atentan contra la dignidad de la persona humana y para acabar con el clientelismo electoral. Los ciudadanos debemos estar informados y para informarse se debe hacer un gran esfuerzo, es cansado, presenta dudas ¿A quién le creo? ¿Quién dice la verdad? Pues para responder entra tu inteligencia y tu trabajo de investigación y ver el contorno que te rodea, entra el que te preocupes por el vecino. Al informarte participas inteligentemente de la vida democrática.
En nuestra vida diaria nos quejamos de todo lo que nos parece adecuado, pero poco hacemos para corregirlo, poco hacemos para exigir al gobernante en turno. No usamos el poder de ir con nuestros representantes a las Cámaras, a los Cabildos para tener información y participar. Queremos mejores Partidos, queremos mejores políticos pero hace falta más ciudadanía comprometida y menos quejas de mesas de café.
Y toda esta introducción la hago porque de los mayores problemas que vivimos hoy en México es que el Titular del Ejecutivo no es un Estadista, no vela por el Bien Común. Él solo quiere ser autónomo en su gobierno y dejar a un lado los logros de la democracia. En este momento el mayor peligro que vivimos en México no es el económico, el de la seguridad, el de la salud, es el de perder la libertad y perder nuestros derechos. Es la invasión de poderes que hace López Obrador, es la militarización de México y la persecución a los que no piensan como él.
Y para demostrar que el resentimiento, las ganas de revancha y el camino de “izquierda” que creen llevan para transformar a México ya se hizo y no funcionó les comento: En las décadas de los 70 y 80 entró la visión socialista populista a México, estábamos con gobiernos totalitarios, teníamos la economía estatizada, se pedía perdón a los pobres, se perseguía con el ejército a los contrarios, la economía dependía del petróleo, la energía eléctrica era del gobierno, en fin lo que ahora quieren revivir ya lo tuvimos y ¿Qué pasó? México se hundió, se perdió el poder ciudadano, ganó la apatía, hasta que 20 años después se despierta.
Así que no se trata de que ahora nos toca a la izquierda gobernar, no se trata de que es mi tiempo, se trata de conocer lo que hemos vivido cuando el gobierno de México era dueño hasta de cines y todo lo quebró, quebró hasta el ánimo ciudadano. Ya sabíamos que López iba contra las instituciones, no sabíamos que mentiría con lo del Ejército y la Marina que ahora les da todo. Y poco a poco Andrés Manuel está acabando con las instituciones autónomas que tanto constó construir. Ya se apoderó del Congreso de la Unión, de Congresos Locales, de gobiernos locales, de la SCJN de Organismos Autónomos y quiere más. Va por el INE, va por la Auditoría Superior de la Federación porque no les gusta que los auditen que los vigilen. Va por la UNAM, va por el INEGI. Pero contra la autonomía ciudadana no podrá.
En próximos días y meses se vienen cambios importantes: En abril del 2022 se deben elegir cuatro consejeros del INE, en diciembre el Gobernador del Banco de México, el presidente del INEGI y tres Ministros de la SCJN. Y eso sin contar las elecciones a gobernadores. Buenos momentos para levantar la voz y hacer valer la fuerza ciudadana. Y como dice Pablo Castellano: “El ciudadano ha de ser ciudadano rebelde y crítico, no puede ser un ciudadano sumiso ni servil”
Y ahora a esperar el resultado de la Cumbre Trilateral de América del Norte a ver que resultados arroja para nuestro futuro. Ya después comentaré del Presupuesto que fue de pavor.
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