“Con la aprobación de esta ley enviamos un mensaje claro a Washington, las mujeres de Nueva York siempre tendrán el derecho fundamental de controlar su propio cuerpo”, aseguró Andrew Mark Cuomo, gobernador de Nueva York.
Con una votación de 38 contra 24 votos, el estado de Nueva York ha aprobado la Reproductive Health Act (Ley de Salud Reproductiva), que avala la práctica del aborto en cualquier momento del embarazo, además que el procedimiento puede ser efectuado por un pasante o enfermera, no necesariamente un médico.
Esta norma establece que el aborto se realice en casos de inviabilidad fetal o cuando sea necesario para proteger la vida o la salud de la paciente.
Andrew Mark Cuomo, gobernador de Nueva York, calificó como “histórica” la aprobación de esta ley, además informó que aunque el caso Roe vs. Wade, responsable de la legalización del aborto en EU, sea revertido por la Corte Suprema el aborto seguirá siendo legal en dicho estado con la nueva norma.
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“Con la aprobación de esta ley enviamos un mensaje claro a Washington (refiriéndose a Donald Trump), las mujeres de Nueva York siempre tendrán el derecho fundamental de controlar su propio cuerpo”, aseguró Cuomo.
Sin embargo, el cardenal Timothy Dolan, arzobispo de Nueva York citó a Martin Luther King y afirmó que “todas las personas tienen derechos: los migrantes, los pobres, las embarazadas y sus bebés”, además de expresar su preocupación por los doctores, pasantes o enfermeras que deban realizar abortos sin tener derecho de objeción.
“Ya no habrá médicos preparados para realizar el procedimiento de desmembramiento, por lo que cualquier bebé que sobreviva a un escalpelo o succión, y siga vivo, podrá ser dejado a su suerte hasta morir, ¿acaso esto es progresismo?”, comentó el cardenal.
Por su parte, el obispo Albany, Edward Scharfenberger, reprochó al gobernador de NY que “no se puede presumir de ser católico” cuando al mismo tiempo promueve el aborto. Ya que anteriormente ha invitado a los ciudadanos de este estado a apoyar al papa Francisco.
Finalmente, una serie de sacerdotes en Nueva York calificaron este suceso como un “capítulo triste” para la historia y aseguraron que el estado “se ha convertido en un lugar más peligroso para las mujeres y sus bebés”.
Tras la aprobación de esta ley en diversos puntos de la ciudad se celebró el acontecimiento y algunos de los edificios más importantes como el Word Trade Center se iluminaron de rosa.
Con información de Actuall.
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