Mencionó que en la vida cotidiana también se comienza por difamar, calumniar y escandalizar; esto último, dijo, genera una gran seducción, mientras que las buenas noticias no tienen el mismo efecto.
El Papa Francisco advirtió sobre la comunicación calumniosa que se utiliza en las dictaduras y en la vida cotidiana cuando se quiere destruir a una institución o a una persona.
En su homilía en la Residencia de Santa Marta, que mártires como Jesús o Esteban, sufrieron en carne propia ese camino que inicia con una mentira y, una vez que se ha destruido a una persona o una situación, se le juzga y se le condena.
El pontífice explicó que esta vía es la que siguen los líderes dictatoriales.
“Por ejemplo, pensemos que existe una ley de medios, de comunicación, se cancela esa ley; se entrega todo el aparato comunicativo a una empresa, a una sociedad que calumnia, que dice falsedades, debilita la vida democrática”.
“Luego vienen los jueces a juzgar a esa institución debilitada, estas personas destruidas, condenadas, y así va adelante una dictadura. Las dictaduras, todas, han comenzado así, con adulterar la comunicación, para poner la comunicación en las manos de una persona sin escrúpulos, de un gobierno sin escrúpulos”.
Mencionó que en la vida cotidiana también se comienza por difamar, calumniar y escandalizar; esto último, dijo, genera una gran seducción, mientras que las buenas noticias no tienen el mismo efecto.
“Y así la comunicación crece, y esa persona, esa institución, aquel país termina en la ruina. No se juzgan al final a las personas. Se juzgan las ruinas de las personas o de las instituciones, porque no pueden defenderse.”
El Papa enfatizó que “la seducción del escándalo” se aplicó, por ejemplo, en el siglo pasado contra los judíos.
“Una comunicación calumniosa contra los judíos y terminan en Auschwitz, porque no merecían vivir” y destacó que eso ocurre hoy “apropiarse de la comunicación, y después la destrucción, el juicio y la muerte.”
Por último, exhortó a los católicos a pensar en “tantas dictaduras con `guantes blancos´ que han destruido los países”.
