A pesar de que muchos estudiantes son víctimas de violencia y acoso en todo el mundo, sólo 32 países tienen una legislación para combatir esta situación, destacó Audrey Azoulaym, directora general de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
En el marco del Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, el organismo multilateral dio a conocer un nuevo informe en el que advierte que estos fenómenos ya no se detienen en la puerta de la escuela, sino que la trascienden, continúan y se amplifican a través de las redes sociales.
En línea con el informe, Azoulay señaló que si bien el acoso es un problema del que ningún país escapa, sólo 32 estados cuentan con un marco jurídico completo dedicado a combatir la violencia en las escuelas. Más aún, 793 millones de escolares viven en países donde no están prohibidos los castigos corporales en la escuela, señaló.
La responsable de la UNESCO aprovechó la efeméride como la ocasión de “dar un salto colectivo hacia adelante para que la lucha contra la violencia y el acoso se convierta en una prioridad educativa”.
En este sentido, la agencia reclamó una mejor protección de los estudiantes contra los ataques físicos, verbales y psicológicos, especialmente ante el aumento de la discriminación y la violencia relacionadas con el género y la identidad sexual.
Datos de la UNESCO, revelan que casi un tercio de los estudiantes del mundo afirma haber sido agredido físicamente al menos una vez durante el año escolar y otro tercio sufre acoso cada mes.
El estudio indica que el ciberacoso es cada vez más frecuente y afecta a uno de cada 10 niños, y que más del 16 por ciento de los menores ha sufrido negligencia física o emocional.
Además, explica que estos fenómenos tienen graves consecuencias no sólo para el aprendizaje, sino que afectan la salud mental de los estudiantes, y precisa que las probabilidades de sufrir soledad severa, insomnio e ideas suicidas se duplican como consecuencia del acoso.
Por otro lado, el informe afirma que la violencia en las escuelas impacta de manera desproporcionada a ciertos grupos en función de su género, orientación sexual, situación socioeconómica y otros factores de identidad.
A nivel mundial, el 42 por ciento de jóvenes lesbianas, gays, bisexuales y transgénero han sido ridiculizados, objeto de burlas o amenazas en la escuela, principalmente por otros estudiantes, debido a su orientación sexual o identidad de género.
En tanto, el análisis resalta que las niñas siguen siendo particularmente vulnerables, señala el estudio, y cita que hasta el 25 por ciento de las adolescentes sufren violencia de género, y que hasta el 40 por ciento de estos incidentes ocurren en las escuelas.
A fin de frenar la violencia y el acoso escolar, la UNESCO enfatiza el papel fundamental de las políticas públicas, normas y cooperación multisectorial. En este aspecto, ha elaborado una serie de guías dirigidas a los profesores.
Asimismo, promueve enfoques inclusivos que involucren a todas las partes: estudiantes, profesores, familias y comunidades para crear entornos de aprendizaje seguros y respetuosos.
El informe hace un llamado a las autoridades educativas de todos los países a intervenir en los programas escolares para garantizar que los contenidos educativos promuevan los valores de la paz y el respeto por los demás.
Para lograr que los sistemas educativos en los que todos los estudiantes puedan aprender y prosperar, estando libres de violencia, exclusión y discriminación se requiere un compromiso inquebrantable, “no sólo con acciones inmediatas, sino con la transformación sostenida y sistemática de la manera en que abordamos la educación”, apunta el estudio.
“Esto no es solo un imperativo educativo, sino también social, esencial para el bienestar y el desarrollo de las generaciones actuales y futuras”, subraya la UNESCO.
¿Sabes cómo prevenir y actuar frente a la violencia del acoso a niños y jóvenes estudiantes?
Te puede interesar: Catástrofes como la de Valencia asechan el mundo
Facebook: Yo Influyo
comentarios@yoinfluyo.com