El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advirtió que a 12 años del inicio del conflicto armado en Siria y los impactos de los terremotos ocurridos el pasado 6 de febrero, han puesto una presión extrema en niños y familias de esa nación, por lo que una crisis de desnutrición infantil es inminente.
Estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) arrojan que desde el inicio del conflicto, cerca de 13 mil menores en Siria han muerto o resultado heridos y, a 12 años, los niños y jóvenes siguen viviendo con miedo a ataques, a la pérdida de familiares y al desplazamiento. “Las hostilidades continúan incesantemente”, indicó.
En Siria, más de 609 mil 900 niños y niñas menores de cinco años sufren de retraso en el crecimiento, “ese retraso es el resultado de la desnutrición crónica y causa a los niños daños físicos y mentales irreversibles”, comentó el Fondo y recalcó que esa situación afecta su aprendizaje, productividad y en su futuro.
La falta de alimento golpea a todos los menores, pues entre los bebés de 6 a 59 meses la desnutrición aguda aumentó un 48 por ciento de 2021 a 2022, “cuando un niño sufre desnutrición aguda su sistema inmunitario se debilita, y tiene once veces más probabilidades de morir que un niño bien nutrido”, explicó el organismo ante la crisis.
Terremotos sentencian a Siria a una crisis de desnutrición
“Los altísimos precios y los ingresos insuficientes hacen que millones de familias están luchando por llegar a fin de mes”, comentó el Fondo y añadió que alrededor del 90 por ciento de la población en Siria vive en la pobreza, situación que empeoró gravemente con los terremotos que sacudieron a Siria y Turquía en febrero.
Antes de los terremotos, a inicios de 2023, más de 3.75 millones de niños en Siria ya necesitaban asistencia nutricional y siete millones de menores urgían de ayuda humanitaria, la atención sanitaria primaria no funcionaba y 6.81 millones de infantes necesitaban servicios básicos de salud.
“Los niños de Siria no pueden esperar más. Tras años de conflicto, y ahora los dos catastróficos terremotos, los futuros de millones de niños penden de un hilo”, explicó Adele Khodr, directora regional de Unicef para Oriente Medio y África del Norte, y recalcó que los terremotos dejaron familias viviendo en condiciones peores a las de antes.
Se calcula que quedan 20 mil médicos en Siria, quienes se enfrentan a los estragos de la guerra, el terremoto y a un reciente brote de cólera, en 2023 el acceso a servicios esenciales de salud y nutrición empeorará, y la representante de Unicef lamentó que desde antes de esta intensa crisis, ya había problemas para recaudar fondos para Siria.
“Debemos responder a las necesidades de los niños dondequiera que se encuentren en Siria y apoyar los sistemas que sustentan los servicios esenciales que tan desesperadamente necesitan”, explicó la experta y concluyó que es vital que surja apoyo mundial y de la sociedad urgente para Siria, pues millones están en peligro.
Para hacer un donativo y ayudar a la población de Siria, puedes hacer un donativo en esta liga: https://www.unicef.es/hazte-socio .
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