La primera ministra británica, Theresa May, anunció el martes por la noche el refuerzo del nivel de alerta terrorista de “grave” a “crítico” tras el atentado suicida cometido por un estudiante de origen libio en Manchester el lunes por la noche y que dejó 22 muertos y 59 heridos.
Elevar el grado de alerta a “crítico” significa que “un nuevo ataque podría ser inminente”, destacó May.
“No podemos ignorar la posibilidad de que un grupo de individuos mayor esté vinculado al atentado de Manchester”, subrayó Theresa May, que también anunció el despliegue de militares para apoyar a la policía.
El nivel de alerta indicado por May desde su residencia en Downing Street es el máximo de los cinco previstos para estas situaciones de emergencia. Este implica que algunas zonas del territorio británico sean resguardadas en conjunto por las Fuerzas Armadas y la Policía por la detección de una amenaza inminente.
La primera ministra británica, Theresa May, confirmó que las fuerzas armadas colaborarán en las tareas de seguridad en sitios clave y que podría desplegarse personal militar en eventos públicos como conciertos y encuentros deportivos.
El ministro de Defensa, Michael Fallon, dio su visto bueno a la puesta en marcha de la “operación Tempora”, la cual prevé la colaboración de hasta cinco mil soldados en acciones lideradas por la Policía.
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