“Calculamos que una de cada 10 escuelas ha sido dañada o destruida”, explicó Catherine Russell, directora ejecutiva de Unicef, y detalló que el sistema educativo en Ucrania ha quedado devastado.
La Unicef informó que se estima que casi un millar de niños ucranianos han fallecido o han resultado heridos en la guerra entre Rusia y Ucrania, y destacó que el sistema educativo ucraniano ha quedado devastado y la falta de educación para niños es un recordatorio de lo mucho que han perdido los menores durante la guerra.
La guerra entre Rusia y Ucrania estalló el 24 de febrero de este año, cuando Rusia invadió tierras ucranianas, y desde entonces, la ola de muerte y horror ha atrapado a los países, dejando a incontables familias incompletas, miles de desplazados, niños huérfanos, mujeres violadas, soldados fallecidos y miles de pérdidas materiales y económicas.
En abril, el cálculo de soldados ucranianos fallecidos era de tres mil y cerca de 10 mil heridos; sin embargo, tras las recientes declaraciones del comandante Valery Zaluzhny, se reportó que “cerca de nueve mil héroes han muerto” y se ha destacado que muchos niños ucranianos necesitarán atención, pues sus padres murieron en batalla.
Niños ucranianos, víctimas de las decisiones imprudentes de los adultos
Catherine Russell, directora ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), explicó que el número de muertes y heridos infantiles que ha dejado la guerra se acerca al millar. “Desde que la guerra se intensificó hace casi seis meses, al menos 972 niños han muerto o han resultado heridos por la violencia en Ucrania”.
Russell explicó que los 972 menores fallecidos o heridos podrían traducirse en más de cinco niños muertos o heridos a diario y detalló que esas cifras son las que la ONU pudo verificar, pero lamentablemente se cree que el número verdadero de pérdidas de menores y heridos es mucho mayor.
“La mayoría de las víctimas infantiles se deben al uso de armamento explosivo. Estas armas no discriminan entre civiles y combatientes, especialmente cuando se utilizan en zonas pobladas, como ha ocurrido en Ucrania: en Mariupol, Luhansk, Kremenchuk y Vinnytsia”, comentó Catherine Russell.
Además, la dirigente internacional de la Unicef subrayó que “las decisiones imprudentes de los adultos” están poniendo en riesgo extremo a los niños y más allá del horror de morir o ser heridos, los niños ucranianos corren el riesgo de vivir separación familias, violencia, abusos, explotación sexual y tráfico de personas.
Finalmente, a días del regreso a clases, Catherine Russell afirmó que es un duro recordatorio de lo mucho que han perdido los niños en Ucrania y recalcó que el sistema educativo en Ucrania ha quedado devastado, por las hostilidades en todo el país, ya que las escuelas han sido objeto de ataques.
“Calculamos que una de cada 10 escuelas ha sido dañada o destruida”, explicó la vocera de la Unicef y lanzó un llamado para que el fuego se detenga en Ucrania, pues todos los niños, incluidos los niños que viven la guerra en Ucrania y los desplazados, merecen seguridad, estabilidad y acceso a aprendizaje seguro.
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