El próximo 6 de noviembre se llevarán a cabo las elecciones federales intermedias en Estados Unidos, lo cual representará un examen para el desempeño del mandatario Donald Trump.
El próximo 6 de noviembre se llevarán a cabo las elecciones federales intermedias en Estados Unidos, donde más allá de la renovación total de la Cámara de Diputados y parte del Senado, así como diversas gubernaturas, se verá comprometida la popularidad del polémico presidente Donald Trump, lo cual determinará de una u otra manera la segunda mitad de su mandato presidencial.
En estas elecciones, que podrán significar un refrendo al estilo de gobernar de Trump o un freno importante a las políticas públicas implementadas desde la Casa Blanca, los norteamericanos elegirán:
• 435 ocupantes para los escaños de la Cámara de Representantes (equivalente a Cámara de Diputados)
• 35 nuevos integrantes del Senado, de un total de 100
• 36 gobernadores estatales
• Y diversos cargos públicos estatales y municipales
¿Qué está en juego esta vez?
Actualmente, el partido Republicano tiene 51 puestos en el Senado; los demócratas, 47, y los otros dos están en manos de independientes, quienes normalmente se alían con los demócratas.
Los republicanos también controlan la Cámara de Representantes, donde cuentan con 238 asientos, de 435
En cuanto a las gubernaturas, en las elecciones intermedias de 2010, el partido Republicano invirtió el número de estados gobernados por el ala demócrata que era de 32, quedando ahora los conservadores con esa misma cifra, la cual han logrado mantener hasta la fecha.
Al respecto algunas encuestas señalan una seria posibilidad de que los demócratas arranquen entre seis y nueve gubernaturas a los republicanos, lo cual generaría un nuevo equilibrio entre los dos grandes partidos políticos norteamericanos.
¿Qué importancia particular tienen estos comicios?
Dependiendo de los resultados del próximo 6 de noviembre y en caso de que estos sean favorables al partido Demócrata, podría significar una seria limitación a la agenda legislativa republicana en el Congreso, además de contar con mayores espacios para investigar a la administración Trump, y aumentar la capacidad para bloquear a los nominados por el presidente para puestos gubernamentales, algo que depende del Senado.
Por otro lado, si los republicanos reafirman su mayoría en la Casa de Representantes y el Senado, estarían en la posibilidad de revitalizar su agenda para los próximos dos años, con temas que van desde la protección a la vida y a la familia natural hasta casos como la migración o negociación de tratados internacionales en materia económica.
¿Bien o mal para Estados Unidos?
La batalla por el Senado estadounidense tendrá consecuencias importantes para los norteamericanos, ya que si los demócratas vuelven a tomar el control de esta Cámara, contarían con la posibilidad de vetar a los nominados de Trump a puestos dentro del gobierno, tanto en los departamentos como en la rama judicial.
Sin embargo el hecho de que los demócratas ganen una o ambas cámaras, no representará un camino fácil para ellos, puesto que no podrían promulgar sus prioridades mientras Trump permanezca en el cargo y pueda ejercer su veto, teniendo en cuenta que la conversión definitiva de un proyecto en la ley federal depende de la firma del presidente.
Otro punto muy importante es que estas votaciones reflejarán el rumbo que tomarán los Estados Unidos en materia de relaciones exteriores, ya que cambiarán los presidentes de los Comités de Relaciones Exteriores tanto de la Cámara de Representantes como del Senado.
¿Por qué son relevantes estas votaciones para México?
Estas votaciones no solo son cruciales para los estadounidenses, ya que a partir de cómo se acomoden los nuevos actores en el Congreso, como en las gubernaturas, habrá un impacto directo en temas que cruciales para los mexicanos.
Si las votaciones del próximo martes resultan favorables al partido Republicano, esto tendría como resultado que Donald Trump no tendría un contrapeso fuerte para avanzar en su agenda legislativa, sin graves repercusiones políticas al estar protegido por su partido.
Algunos analistas han señalado que un triunfo de los demócratas ya sea en el Senado o en la Cámara de Representantes, obligaría a Donald Trump a modificar, por ejemplo, las fuertes presiones antimigrantes que actualmente padecen tanto mexicanos como centroamericanos que cruzan la frontera con ganas de alcanzar el sueño americano.
Tratados Trilaterales
Otro tema a destacar tras los resultados de las votaciones intermediarias, son los tratados que hay entre México, Canadá y Estados Unidos, que aunque todo parece estar claro para el llamado USMCA, aún tiene que ser rectificado por los tres países.
Canadá no muestra problema al igual que México para rectificar el acuerdo, el problema es por parte de Estados Unidos, ya que si las Cámaras del Congreso Estadounidense se ven divididas tras las votaciones, podrían buscar intereses diferentes para dicho acuerdo trilateral.
La migración y Donald Trump
Sin embargo, el tema principal para el resultado de las votaciones y la división de poder en las Cámaras del Congreso estadounidense es en torno a la migración y a su frontera con México.
Una de las principales iniciativas por las que Trump ganó el poder fue por prometer un muro que impediría el pasó a migrantes mexicanos sin documentación y que sería pagado por los propios mexicanos.
En materia de migración, durante las últimas semanas Donald Trump ha realizado 11 mítines en ocho estados con un discurso antiinmigración además de mandar a 5 000 militares a la frontera con México para detener las caravanas hondureñas.
Ahora bien, el partido Demócrata no ha señalado a las caravanas como amenazas para Estados Unidos, solamente han declarado una propuesta para utilizar drones y sonares para evitar que los migrantes pasen por arriba o debajo del muro como indocumentados.
Por lo que de ganar los demócratas no significará una puerta abierta para migrantes mexicanos, hondureños o de cualquier otro país latinoamericano, sólo una posible nueva regularización en materia migratoria.
Y de conseguir la victoria el Partido Republicano, todo apunta a la continuación de una serie de pronunciamientos racistas y proteccionistas por parte de Donald Trump, quién ha hecho fuertes declaraciones contra los migrantes, diciendo que en sus filas vienes criminales y delincuentes.
Según el mercado de apuestas políticas de predictit.org, hay un 70% de probabilidad de triunfo y mayoría para los demócratas en la Cámara de Representantes y un 80% de probabilidades de que los republicanos mantengan el control en el Senado.
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