Tras una investigación realizada por la agencia noticiosa AP, que puso al descubierto una telaraña de sobornos en la cadena de distribución de alimentos en Venezuela, así como el pago de sobreprecios a proveedores y la tardanza en la entrega de los víveres, senadores de Estados Unidos pidieron al presidente Donald Trump imponer sanciones al respecto.
La investigación de la agencia noticiosa AP se basó en la revisión de documentos y en alrededor de 60 entrevistas a empresarios, trabajadores e incluso 5 ex generales.
Cabe recordar que en el “pico” de la crisis alimentaria, Nicolás Maduro entregó el control de la cadena de distribución a militares, primero al General Carlos Osorio y posteriormente al General Rodolfo Marco Torres, quienes resultaron señalados en las irregularidades reportadas en la investigación.
Un proveedor de maíz habría señalado que pagó 8 millones de dólares a subalternos del General Marco Torres y que a su vez el pago de su embarque tenía un sobreprecio de varios millones de dólares, para facilitar el pago de los sobornos. En su momento, la Asamblea Nacional de Venezuela buscó censurar al General Marco Torres, lo que rechazó el presidente Maduro.
Asimismo, se explicita en la investigación que dos empresas que realizan ventas al gobierno venezolano han hecho depósitos por 5 millones de dólares a cuñados del General Carlos Osorio.
Lo delicado del asunto, es que el cobro de los diferentes sobornos retrasa la distribución de las mercancías, y de hecho cantidades importantes de alimento se descomponen. Un operador de grúas en Puerto Cabello dijo haber visto cómo militares enterraban centenas de contendores de carne, pollo y granos echados a perder. Algunos de los alimentos que llegan a Venezuela son adquiridos en EU y además se pudo haber utilizado el sistema financiero de este país para lavar dinero, así que sus fiscales ya realizan una investigación.
La información recabada por la agencia noticiosa AP repercutió en el Senado de Estados Unidos, sumando distintas voces de descontento, como la de Marco Rubio, senador republicano por Florida, quien señaló que las sanciones a este respecto “debería de ser una de las primeras acciones del presidente Trump”; y a su vez, el senador demócrata por Maryland, Ben Cardin, dijo que “la corrupción ha alcanzado nuevos niveles de perversión que no pueden quedar inadvertidos”.
En el mismo tenor se pronunciaron la representante republicana por Florida, Ileana Ros-Lehtinen, y Bob Menendez, senador demócrata por New Jersey.
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