Red Familia hizo un reconocimiento a las mujeres que no bajan la guardia y día a día luchan por sacar adelante a sus familias, a pesar de las condiciones adversas que enfrentan, muchas de estas acrecentadas por la pandemia.
Red Familia urgió a trabajar para implementar medidas y estrategias que permitan reducir las brechas de género, proteger los derechos laborales de las mujeres e incentivar la incursión de ellas en los empleos formales a partir de leyes que favorezcan el equilibrio entre familia y trabajo.
Durante la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la asociación civil recordó que a consecuencia de la pandemia algunos hombres jefes de familia perdieron su trabajo, por lo que sus compañeras de vida se han convertido en el único o principal sostén de sus hogares y se han visto obligadas a incorporarse al trabajo informal.
De los mayores retos durante el confinamiento, señaló el organismo, ha sido poder solventar gastos básicos como alimentación, pago de luz, agua, renta, colegiaturas de los hijos, créditos y deudas bancarias, así como el servicio de internet y equipo de cómputo para que sus hijos tomaran clases en línea y ellas pudieran continuar trabajando desde casa.
De acuerdo con datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en México, cerca de 1.3 millones de mujeres perdieron su empleo formal ante el brote de COVID-19, razón por la que muchas de ellas optaron por autoemplearse y emprender su propio negocio de ventas en línea, a través de redes sociales o hasta por WhatsApp; también ofrecen cosméticos, preparan comida, venden artículos de segunda mano, incluso, hay quienes han tenido que vender algunos de sus muebles para poder obtener recursos y sacar adelante a su familia.
Aunado a esto, indicó, las mujeres asumieron mayores responsabilidades en casa, con la familia y en la carga laboral, lo cual ha generado aumento en los niveles de estrés, ansiedad y depresión de muchas mujeres porque además de trabajar, se convirtieron en profesoras y cuidadoras de sus propios hijos, en cocineras, en supervisoras de niños y/o adultos mayores (generalmente, familiares), en administradoras y participantes activas de otras tareas del hogar. Según datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo 2020 (ENOE), las mujeres dedican el 64 por ciento de su tiempo a las labores domésticas, mientras que los hombres sólo ocupan el 24 por ciento.
Red Familia destacó que a pesar de los desafíos que ha presentado la pandemia y que ha ocasionado que ellas tengan una mayor carga de trabajo y responsabilidad tanto en su hogar como en lo social, las mujeres no se han dado por vencidas y han jugado un papel fundamental durante el confinamiento.
En cuanto a la recuperación económica del país, Red Familia destacó que las mujeres están en condiciones desventajosas frente a la población masculina, toda vez que frente a las necesidades están buscando generar ingreso de manera informal para que esto les permita permanecer en sus hogares al cuidado de sus hijos, lo que por supuesto las pone en una situación vulnerable al no contar con los servicios básicos de salud.
La asociación mencionó que de acuerdo a datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la vida económica y productiva de las mujeres se verá afectada de manera muy desproporcionada en comparación con los hombres, esto debido a que las mujeres ganan menos, ahorran menos, tienen empleos más inseguros y hay mayor posibilidad de que trabajen en el empleo informal.
Por estas razones, Red Familia hizo un llamado a las autoridades, organismos y a la sociedad a implementar medidas y estrategias que permitan reducir las brechas de género, proteger los derechos laborales de las mujeres e incentivar la incursión de ellas en los empleos formales a partir de leyes que favorezcan el equilibrio entre familia y trabajo.
Las organizaciones y los líderes tienen la gran tarea de apoyar a las mujeres que se encuentran en el mercado laboral para adaptarse y prosperar en un contexto caracterizado por múltiples desafíos.
Finalmente, Red Familia hizo un reconocimiento a las mujeres que no bajan la guardia y día a día luchan por sacar adelante a sus familias, a pesar de las condiciones adversas que enfrentan, muchas de estas acrecentadas por la pandemia.
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