El presidente casi siempre tiene datos diferentes a los que le presentan los medios de comunicación: según él sus datos son los válidos y son con los que tomará las decisiones.
Los datos y las cifras del presidente Andrés Manuel López Obrador y la prensa casi nunca coinciden; los números del mandatario son positivos mientras que los de los comunicadores muestran que la situación no va tan bien como lo informa el equipo de la Cuarta Transformación.
“Tengo otros datos” es la respuesta del presidente cada que la información no es la misma a la que él conoce.
En el informe diario de homicidios dolosos elaborado por el equipo interdisciplinario en el que participan integrantes de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, de la Defensa Nacional, de Marina y la Procuraduría General de la República no se reportan todos los homicidios que se dan a conocer en los medios de comunicación.
Lo anterior hace pensar que los profesionales de la comunicación tienen mayor conocimiento de la situación del país que las mismas autoridades de seguridad.
De acuerdo con la metodología que implementó la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) para obtener las cifras diarias, en lo que ellos llaman la “Mesa de Situación”, reciben información por parte de cada una de las Procuradurías Generales de Justicia o Fiscalías Generales de Justicia de las 32 entidades del país, y dichos números se comparan con los que tengan los enlaces federales del Gabinete de Seguridad.
Es decir, ellos dependen de las dependencias locales que son las encargadas de enviar la información al Centro Nacional Planeación, Análisis e Información para el Combate a la Delincuencia: los datos diarios dependen de la transparencia de las autoridades municipales y estatales.
Toda esa información sirve para emitir las cifras diarias de víctimas por delito de homicidio reportadas por el grupo interinstitucional.
En el mismo informe diario también se incluyen los homicidios dolosos, pero según el conteo de los medios de comunicación, ya sea medio electrónico, prensa, radio, televisión, e inclusive redes sociales. Este conteo corresponde otro equipo denominado “Mesa de análisis”.
En el micrositio de la SSPC explican que la información es enviada a la Mesa de análisis, pero no especifican quién la manda. Tampoco detallan el criterio de cómo atribuyen las cifras a determinados medios; es decir, varios espacios informativos dan a conocer la misma noticia sobre la muerte de habitantes de determinada región, pero la fuente se le atribuye a un solo medio.
Por ejemplo, a pesar de que Televisa o su filial Foro TV tienen una amplia cobertura a nivel nacional y ha informado de varios homicidios, es difícil encontrar a la televisora como una fuente. En lo que va del mes de octubre, sólo se ha considerado como fuente en ocho ocasiones.
El equipo encargado de revisar, analizar, convalidar e integrar la información de homicidio dolosos por “fuentes abiertas” está integrado por representantes de las instituciones que conforman el Gabinete de Seguridad (compuesto por las secretarías de Seguridad y Protección Ciudadana, de Marina, y de la Defensa Nacional).
A pesar de que en la página de Seguridad y Protección Ciudadana presume: “Este gobierno no participará en una dinámica de simulación u ocultamiento de datos de información criminal”, la metodología aplicada no es clara.
Asimismo, en la página de SSPC se advierte que el reporte diario incluye datos preliminares sujetos a la determinación jurídica de las autoridades correspondientes, y sólo se usan para la operación estratégica, no obstante, son las cifras que se le presentan al presidente en sus reuniones diarias antes de la conferencia mañanera.
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Los números no cuadran
En la siguiente tabla se presenta el número de homicidios reportados por el grupo interinstitucional que recibe la información de las autoridades de seguridad locales, y por las fuentes abiertas, es decir, los medios de comunicación y redes sociales.
Los números varían, pero a final de cuentas la diferencia –aún con la falta de claridad con respecto a la metodología para considerar a las fuentes– da como resultado que 79 muertes no fueron consideradas por las cifras preliminares del Gobierno Federal.
A pesar de que la SSPC señala que el procesamiento de la información trabaja las 24 horas, en varias ocasiones las cifras no coinciden.
Los números correspondientes al 14 de octubre no coincidían con los hechos sucedidos ese día en el que murieron 14 agentes de la Policía de Michoacán en una emboscada por integrantes de grupos del narcotráfico. Mientras que en el informe diario del grupo interinstitucional reportaban sólo tres homicidios en Michoacán; con las fuentes abiertas se registraron 19 muertes en la entidad, 14 de ellas correspondían al municipio de Aguililla en el que sucedió el ataque a los uniformados.
Dos días después, el 16 de octubre, en el informe diario que basa sus datos en las instituciones locales, aclararon que la cifra de ese día incluía 13 homicidios de ocurridos el 14 octubre.
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