Las elecciones presidenciales de Estados Unidos que serán el 05 de noviembre de 2024, están a la vuelta de la esquina y los millones de ciudadanos se preparan para ejercer su derecho al voto, no sólo eligiendo al próximo presidente, sino que también decidiendo sobre el curso político y social de uno de los países más importantes.
Con el panorama político más polarizado que nunca, tanto demócratas como republicanos han intensificado sus campañas en un esfuerzo por ganar la confianza de un electorado cada vez más diverso y exigente. Las elecciones se han moldeado en un camino marcado por el COVID-19, cuestiones raciales, tensiones geopolíticas, como la guerra entre Ucrania y Rusia, y entre Israel y Palestina, y el crecimiento e importancia internacional de China.
El 05 de noviembre, no solo está en juego la presidencia de EUA, también 435 escaños de la Cámara de Representantes y un tercio de los lugares del Senado; además, “existe el riesgo de que se geste un conflicto postelectoral en caso de que Trump salga derrotado, toda vez que podría desconocer (nuevamente) los resultados”. A datos del 17 de octubre recabados por Integralia, así van las probabilidades de triunfo de demócratas (Kamala Harris de azul) y republicanos (Donald Trump de rojo) en el Colegio Electoral.
Candidatos y sus principales propuestas
En el lado republicano, tras un proceso de primarias muy competitivo, está el regreso del expresidente Donald Trump, quien busca una segunda oportunidad para regresar a la Casa Blanca. Su mensaje de “América primero” sigue resonando en el electorado, siendo la propuesta de inmigración la más fuerte y su favorita desde 2016.
Sin embargo, Trump también ha hablado de “recuperar” la economía del gigante del norte ya que el costo de vida para los estadounidenses se ha disparado; respecto a las guerras, el expresidente asegura que puede terminar con la de Ucrania y Rusia en 24 horas; mientras que en la cuestión climática, destacó que, apenas llegue a la presidencia volverá a quitar a EUA del Acuerdo de París y propuso más perforaciones para extraer petróleo y gas, y en la guerra de Medio Oriente reafirmó su apoyo a Israel.
Según Integralia, entre las principales consecuencias para México del gobierno de Trump estrían las deportaciones masivas que generaran tensión; la renegociación del TMEC podría causar “presión diplomática-comercial”; la implementación de aranceles a empresas automotrices que busquen invertir en México desincentivara la inversión extranjera a México y habría un posible aumento de violencia en la lucha contra las drogas.
Por el lado demócrata y luego del anuncio de la salida del candidato y también presidente Joe Biden, está Kamala Harris, quien ocupaba la vicepresidencia. Entre sus principales banderas está la defensa de los estadounidenses de todas las razas, el apoyo a la comunidad LGBTQ+, las guerras, y propiciar semáforos verdes para el aborto.
Harris ha propuesto buscar mayores beneficios fiscales para las familias de clase media; respecto a aborto, Kamala ha denunciado las leyes reproductivas que impiden la práctica y se ha mostrado a favor; de la situación en Gaza la candidata lo ha calificado como “devastador” pero destacó que en su administración seguirá respaldando a Israel y respecto a la guerra en Ucrania y Rusia, reafirmó su apoyo a Zelensky, presidente de Ucrania.
Mientras que según Integralia, el gobierno de Harris podría, afectar la revisión del TMEC de 2026, implementando políticas sindicalistas y exigiendo a México mayores condiciones para inversión; en materia de energía, Integralia destacó que podría haber oportunidad de cooperación entre Sheinbaum y Harris, y el comercio de su administración se podría enfocar a temas laborales y ambientales plenamente.
Redes sociales, imperativas en las elecciones
Tal y como lo vivimos en México con las elecciones de junio, las redes sociales están jugando un papel crucial en las elecciones estadounidenses, siendo X, Instagram, TikTok y Facebook las principales plataformas por las que los candidatos se comunican e intentan movilizar a los votantes, en especial a los millenials y la generación Z.
De acuerdo con datos oficiales, en los últimos 100 días, la campaña de Kamala Harris lleva 37 mil anuncios tan solo en Meta, donde se han gastado poco más de 50 millones de dólares; mientras que 31 millones de dólares más se han invertido en YouTube y Google, en un promedio de ocho mil mensajes.
Mientras que, Donald Trump ha invertido alrededor de seis millones de dólares en cinco mil anuncios en Meta y cerca de 9.3 millones en Google y YouTube. Por su parte, la Universidad de Harvard ha destacado que la inversión de Harris la ha llevado a ser la favorita de los votantes de 18 a 29 años, que muchas veces son los más renuentes.
“Hay fuerte apoyo a las políticas progresistas entre los jóvenes estadunidenses, con un 74 por ciento a favor de limitar los precios de los medicamentos recetados y un 59 por ciento a favor de una ley nacional para legalizar el aborto”, aseguró la universidad y aseveró que, a comparación del apoyo que tenía Biden como candidato antes de abandonar la campaña, Harris ha superado por mucho las estadísticas.
Las elecciones presidenciales de 2024 serán determinantes para el futuro de EUA y de México, por lo que hoy más que nunca cada voto cuenta. La participación ciudadana será clave en la decisión sobre qué tipo de liderazgo y políticas guiarán al país en los próximos años, y es esencial que los votantes se mantengan informados y comprometidos para asegurar una democracia sólida y representativa.
¿Qué crees que le depara a México con los resultados de las elecciones en EUA?
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