“Cerrar fronteras y contruir muros no son actos racionales”, expresó en un comunicado el Arzobispo de Newark (Nueva Jersey), Cardenal Joseph W. Tobin, sobre las órdenes ejecutivas que en materia de inmigración emitió el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El Cardenal Arzobispo explicó que “las detenciones y deportaciones masivas no benefician a nadie; son políticas inhumanas que destruyen familias y comunidades”. Señaló que amenazar a las denominadas “ciudades santuario” con retirarles recursos, no detendrá la inmigración, sólo les quitará servicios básicos a “personas buenas de esas comunidades”.
Monseñor Tobin señaló que él mismo es nieto de inmigrantes y que creció en un barrio multicultural en el suroeste de Detroit, y compartió que en su experiencia pastoral ha conocido comunidades integradas por personas de diferentes nacionalidades y son grandes comunidades.
Por otro lado, informó que la Arquidiócesis se está preparando para recibir a un grupo de 51 refugiados de Siria, Afganistán, Irak y República Democrática del Congo, quienes han aprobado todos los requisitos pedidos por el gobierno y contarán con el apoyo de los fieles y las parroquias.
El Cardenal señaló que entiende el anhelo de tener fronteras seguras, sin terrorismo; pero también comprende la llamada del Señor de no oprimir al extranjero, de reconocer al mismo Jesús en los más débiles. Así, consideró que “las órdenes ejecutivas… no muestran que Estados Unidos sea un país abierto y acogedor. Es lo contrario de lo que significa ser americano”.
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