A principios de septiembre, la fiscalía del estado de Jalisco informó del hallazgo de una fosa clandestina en Zapopan, en la cual se encontraron 119 bolsas con restos humanos.
A principios de 2019 la Comisión Nacional de Búsqueda -organismo del Gobierno Federal- dio la cifra de 40 180 personas desaparecidas, sin embargo, organizaciones civiles y familias afectadas acusan que son más. En realidad es muy difícil conocer cuántas personas están desaparecidas y cuántas se han encontrado en las fosas clandestinas.
Francisco Granados González, director del Instituto de Formación y Consultoría para la Seguridad, explica que la razón por la cual se han encontrado más cuerpos, se debe a que el aumento de homicidios relacionados con el crimen organizado, sin embargo, aseguró que las estadísticas de reporte en fosas clandestinas no son del todo confiables, porque de 10 demandas, dos inician carpetas de investigación.
Además de esto, Francisco Granados también asegura que las instituciones de procuración de justicia no cuentan con personal suficiente y especializado para procesar las fosas clandestinas, además de que la cantidad de cuerpos encontrados hasta ahora han rebasado los servicios forenses, ya que la infraestructura de los Semefos es insuficiente para almacenarlos y conservarlos.
Entre 2014 y lo que va de este 2019, en tan sólo seis municipios del país se han encontrado 52.8% del total de fosas clandestinas; se tratan de Durango, Durango; San Fernando, Tamaulipas; Acapulco y Taxco de Alarcón, Guerrero; La Barca, Jalisco, así como Ciudad Juárez, Chihuahua.
En dichos lugares se exhumaron 749 cuerpos, según datos de la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos.
El director del Instituto de Formación y Consultoría para la Seguridad asegura que se ha documentado que el crimen organizado hace las fosas clandestinas en zonas rurales, alejadas de las urbes, pero que, además de eso, también utilizan panteones como ha ocurrido en Oaxaca y Michoacán, lo que hace más difícil encontrar al desaparecido.
El pasado mayo, durante una gira de trabajo en Nayarit, Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, dijo que no descartaba el descubrimiento de más fosas clandestinas, principalmente porque ha aumentado el número de denuncias por desaparición.
Según Granados González para poder solucionar este fenómeno tan complejo, es necesario desactivar la rivalidad que tienen los distintos grupos de la delincuencia organizada, sin embargo, entendiendo que esa solución es difícil de conseguir; es necesario que exista en todas las fiscalías del país personal especializado y suficiente para procesar las fosas clandestinas, por lo cual el especialista calificó de importante la formación de más peritos.
A pesar de que se tenga registrado que 52.8% del total de fosas clandestinas se encuentran en los estados antes señalados, en 2018 los estados con más número de denuncias por homicidio y desaparecidos son: Guanajuato, Baja California, Estado de México, Guerrero, Jalisco, Chihuahua y Oaxaca. Siendo únicamente Guerrero, Jalisco y Chihuahua, los estados en los que coinciden las denuncias por desaparición y homicidio, con el descubrimiento de cuerpos en fosas clandestinas.
En ese sentido, Francisco Granado González asegura que es difícil que encuentren a las personas desaparecidas que aún se encuentran enterradas en fosas clandestinas sin descubrir, porque tenemos un territorio muy amplio, y por ello, los secuestran en un estado y los matan y entierran en otro lejano.
Por ello, Granado González asegura que es recomendable que todos nos hagamos un perfil de huella genética por si en el futuro se llega a requerir nuestra información, además de que se debe crear el Sistema de Identificación y Resguardo Nacional Forense que integre bases de datos antemortem y posmortem, todo de la mano de una estrategia de seguridad eficiente.
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