En la Ciudad de México operan muchos cárteles al mismo tiempo, principalmente porque algunos controlan el tráfico y la venta de diferentes drogas, además de que su operación es por colonias, según un informe de la DEA y especialistas.
En la primera entrega de esta investigación, se describió la creación y la operación de los cárteles nativos de Ciudad de México. En esta segunda entrega se describe cómo operan en la capital del país los cárteles nacionales, así como su forma de violentar la ley.
Un informe de la dirección general de inteligencia de la Policía de Investigación, citado en la primera entrega de este reportaje, asegura que en la Ciudad de México operan 4 grupos de la droga, los cuales se han disputado territorios y giros delictivos, lo que ha provocado en los últimos años la capital sea más violenta.
Por otro lado, la Agencia Anti Drogas de los Estados Unidos (DEA) afirma que durante varios años los cárteles que dominan el narcotráfico a nivel nacional también han trabajado en la capital, por lo cual no son 4 sino 11 los grupos que negocian con drogas.
Sandra Romandía, periodista y coautora del libro Narco CDMX: El Monstruo que nadie quiere ver, asegura que con el inicio del combate violento a los cárteles de las drogas, en 2006, se decía que la capital parecía una isla, donde no tenía lugar la violencia que dominaba otras ciudades, a pesar de que por años los cárteles nacionales han operado en Ciudad de México.
La periodista asegura que uno de los primeros indicios de que los cárteles ya “trabajaban” en la capital del país, fue el caso de los decapitados en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
En enero de 2008, un vecino del AICM dio aviso a las autoridades capitalinas sobre el hallazgo de dos cabezas humanas que estaban dentro de unas bolsas de plástico. Ante ese hecho, el entonces jefe de la policía en la ciudad, Jesús Ortega, dijo que cada vez que hay un decomiso importante en la terminal aérea se producen “ajusticiamientos”, pero que no se puede asegurar que esos indicios tengan que ver con el crimen organizado.
Otro caso que demuestra que por años han operado los cárteles de la droga en la Ciudad de México, asegura Romandía, es el de los desaparecidos del bar Heaven, que estaba ubicado a espaldas del Ángel de la Independencia.
En mayo de 2013, un grupo armado, escoltado por patrullas capitalinas, secuestró a 13 jóvenes que salían del bar Heaven. Seis meses después, sus cuerpos fueron encontrados en fosas clandestinas en Tlalmanalco, en el Estado de México; la especialista desctaca que este suceso fue similar al ocurrido en Iguala con los 43 desaparecidos de la normal rural, y provocó el cobro de “derecho de piso” que los cárteles de la droga cobran a negocios capitalinos a cambio de “protección”, con cuotas que van de los 5 mil a los 200 mil pesos. Desde entonces, no ha pasado nada similar en la Ciudad de México.
El informe de la DEA asegura que en la capital operan, además de la Unión Tepito, la Anti Unión, el Cártel de Tláhuac y el Cártel Jalisco Nueva Generación, 7 cárteles más.
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La Familia Michoacana, pese a estar prácticamente desaparecida en Michoacán, ha logrado sobrevivir e instalarse en el Estado de México y la capital del país, funcionando como una organización de franquicias integrada por pequeños grupos delictivos y operando en alcaldías como Gustavo A. Madero, Iztacalco, Iztapalapa, Magdalena Contreras, Tláhuac y Tlalpan. Sus giros delictivos principales son el tráfico de drogas y la extorsión.
Guerreros Unidos, surgido a finales de 2011 y acusado de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapan, también estuvo involucrado en la desaparición y asesinato de los jóvenes del bar Heaven, según indican algunos especialistas; su operación en la capital se da en las alcaldías Azcapotzalco, Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Iztacalco, Iztapalapa, Magdalena Contreras y Tlalpan; se especializa en el tráfico y control específico de las rutas de la droga en la capital del país.
El Cártel Jalisco Nueva Generación es una organización delictiva que en los últimos 10 años se ha colocado como uno de los 6 principales cárteles que dominan el país. En la Ciudad de México se presume que tiene una alianza con el Cártel de la Anti Unión y el Cártel de Tláhuac. En la capital del país, el CJNG se dedica al tráfico de drogas y la venta de cocaína, metanfetaminas, mariguana y heroína en las alcaldías Coyoacán, Iztapalapa, Tláhuac, Tlalpan y Xochimilco.
El Cártel de Sinaloa fue el grupo dominante en México durante varias décadas, pero en los últimos años ha empezado a fragmentarse, disminuyendo su dominio en el tráfico de drogas; en la Ciudad de México delinque en las alcaldías Cuauhtémoc, Iztapalapa, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza, controla el tráfico y la venta de cocaína, metanfetaminas y heroína.
El Cártel del Golfo, cuya base principal se encuentra en Tamaulipas, también opera en la Ciudad de México, principalmente en colonias de las alcaldías Gustavo A. Madero e Iztapalapa, donde vende y trafica mariguana. Los Caballeros Templarios, grupo escindido de la Familia Michoacana, opera en las alcaldías Iztapalapa y Benito Juárez, controlando los delitos de robo a casa habitación, secuestro, venta y tráfico de metanfetaminas. El Cártel de los Beltrán Leyva tiene la peculiaridad de ser los principales impulsores de la creación del Cártel de la Unión Tepito. Este grupo delictivo opera en las alcaldías Cuajimalpa y Miguel Hidalgo y se dedica principalmente a la venta de cocaína, metanfetaminas, mariguana y heroína.
Por último, el Cártel de los “Z“, que a nivel nacional fue conformado principalmente por desertores militares, también opera en la capital, principalmente en las alcaldías Cuauhtémoc e Iztapalapa. Este grupo delictivo tiene la coordinación del robo de combustibles, extorsión, renta de piso, tráfico de drogas y venta de cocaína, mariguana, metanfetaminas y heroína.
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