“Es urgente que los mexicanos sepan que están consumiendo, pues el país alcanza números extremadamente altos en obesidad y diabetes”, aseguró Paulina Magaña, nutrióloga de la iniciativa Etiquetados Claros.
No importa si es un supermercado o una tienda de abarrotes, en cualquiera de esos establecimientos mexicanos la variedad de comida es amplia. Frituras, pan, galletas, dulces, embutidos, refrescos y casi cualquier alimento esta de venta en esos lugares; sin embargo, aunque conocemos donde comprar esos productos y su presentación, es poca la información nutricional y lo que sabemos de sus ingredientes y preparación.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), explicó que los etiquetados de alimentos aportan información sobre la identidad y contenido de un producto para saber cómo manipularlo, prepararlo y consumirlo, y recalcó que con el aumento del comercio mundial y la desaparición entre la relación productor-consumidor, existe la necesidad de crear etiquetados alimentarios confiables, no engañosos.
Paulina Magaña, nutrióloga que impulsa la iniciativa de Etiquetados Claros junto con la organización El Poder del Consumidor y la Alianza por la Salud Alimentaria, explicó que el etiquetado actual, denominado Guía Diaria Alimentaria (GDA) y establecido en 2011, es incompleto y difícil de entender para los consumidores.
Magaña indicó que para los mexicanos es urgente saber qué están consumiendo, pues el país alcanza números extremadamente altos en obesidad y diabetes, además es la nación que más consume alimentos procesados en América Latina. Datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) arrojaron que México es el país que consume la mayor cantidad de alimentos procesados en América Latina y el Caribe. Cada mexicano ingiere un promedio de 581 gramos de comida procesada al día.
De acuerdo con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), México es el país líder mundial en obesidad infantil y según datos de la Secretaría de Salud, cuatro de cada diez menores padecen obesidad; sin embargo, esa enfermedad no sólo afecta a los pequeños, 24 millones de adultos también la padecen.
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Etiquetados claros, para la sana alimentación
La nutrióloga aseguró que tanto ella como varios nutriólogos y organizaciones trabajaron en la iniciativa Etiquetados Claros, que buscó lograr que se reformara la Ley General de Salud y con ello eliminar el etiquetado conocido como Guía Diaria Alimentaria (GDA), para implementar el Etiquetado Frontal de Advertencia que de manera sencilla y concreta dice al consumidor lo que consume y si lo que contienen los productos representan un riesgo para la salud de las personas.
Paulina Magaña comentó que el Etiquetado Frontal de Advertencia no da la información en calorías y porcentajes, más bien presenta al frente de todos los empaques un octágono negro que advierte al consumidor cuando los productos exceden las cantidades de azúcares, sodio, grasas o calorías; nutrimentos seleccionados específicamente porque se relacionan al problema de obesidad.
La reforma a la Ley General de Salud fue aprobada el pasado 1 de octubre por la Cámara de Diputados y en cuanto el presidente Andrés Manuel López Obrador apruebe que la reforma entre en el Diario Oficial de la Federación, entrará en vigor la ley. Si quieres conocer más acerca de Etiquetados Claros y del nuevo Etiquetado Frontal de Advertencia, puedes visitar la página oficial de esa iniciativa.
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