La Coparmex ofreció colaborar con el gobierno para lograr el abasto total de medicamentos y tratamientos contra el cáncer y otros padecimientos para ayudar a que lleguen a los niños que lo requieren.
Desde que inició la actual administración federal, encabezada por el presidente Andrés Manuel López, el sector infantil ha sido “el más olvidado”, como lo demuestra la cancelación de programas de apoyo como las estancias infantiles, además de no resolver problemas que ponen en riesgo la vida de los menores como el desabasto de medicamentos y tratamientos contra el cáncer, y excluyéndolos de ser vacunados contra el COVID-19 a pesar del peligro que sigue representando la pandemia y ahora está en vilo la aprobación de la NOM 237 que asestaría un duro golpe a la educación de miles de niños y jóvenes, aseguró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
El organismo empresarial destacó que a pesar de que el jefe del Ejecutivo prometió que para finales de octubre toda la población mayor de 18 años (alrededor de 80 millones de personas) habría recibido por lo menos una dosis de vacuna contra el SARS-CoV-2, de acuerdo a la organización Our World in Data reportó que al corte del 3 de noviembre 57 por ciento de la población mexicana recibió una dosis, mientras que 47 por ciento tiene el esquema completo, cabe destacar que en estas cifras no se incluyen a un solo niño.
Asimismo, según la Secretaría de Salud se han registrado un total de 904 defunciones en este segmento de la población, por lo que resaltó la importancia de vacunar a los niños y jóvenes, toda vez que “a medida que la población infantil se vaya vacunando, el riesgo de hospitalización o muerte en niños y adolescentes disminuirá de manera radical, sobre todo, dada su exposición ante el retorno a clases presenciales”.
Por otra parte, en lo que respecta a la educación, la Coparmex dijo que a pesar de los esfuerzos por mantener clases de forma virtual no todos los niños tuvieron acceso para continuar sus estudios por lo que reconoció que existe un rezago.
No obstante, subrayó que el sector educativo fue uno de los más severamente golpeados y lo sigue siendo porque no todos los estudiantes han regresado presencialmente a las aulas; pese a este ya de por sí adverso escenario, el gobierno federal impulsa la NOM 237, la cual calificó como “devastadora para la educación”.
Señaló que de aprobarse esta norma, el derecho a decidir de los padres se limitaría y mencionó que según expertos pondría en riesgo de cierre a por lo menos 18 mil planteles educativos privados afectando a 540 mil niños y jóvenes. “Esta sería una pesada losa que no todas las escuelas podrían soportar y que busca equiparar el servicio educativo a un acto comercial”, apuntó.
La Coparmex advirtió que “la NOM 237 no pone en el centro la educación los derechos de los niños, sino la burocracia”.
Frente a este panorama, el sindicato empresarial que encabeza José Medina Mora Icaza, hizo una serie de propuestas con la intención de visibilizar a los niños, garantizar sus derechos y asegurarles una vida feliz.
Para hacer valer el derecho a la salud, la Coparmex ofreció colaborar con el gobierno para lograr el abasto total de medicamentos y tratamientos contra el cáncer y otros padecimientos, bajo estándares de transparencia, eficiencia y condiciones de competencia que aseguren precios adecuados. “Es hora de dejar atrás la improvisación que ha costado miles de vidas”.
Además, el organismo empresarial pidió a la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) acelerar sus procesos para aprobar la vacuna contra el COVID-19 para los menores y a la Secretaría de Salud incorporar a los niños al Plan Nacional de Vacunación, y recordó que en México se estima que hay entre 750 mil y hasta un millón 500 mil menores con enfermedades crónicas en México y ellos deben ser prioridad.
Finalmente, la Coparmex aseveró que la NOM 237 es un despropósito que privilegia la burocracia y lastimará a los niños, por lo que hizo un llamado a las autoridades para que no se apruebe pues se debilitaría y vulneraría aún más al sector educativo, sino por el contrario consideró que debe impulsársele con energía y visión, pues “un niño con educación de calidad es un niño con mejor futuro”.
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