De acuerdo con datos recopilados por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDo), en diciembre las familias mexicanas no solo gastan de más, si no que adquieren y consumen masivamente bebidas alcohólicas y productos procesados o con exceso de grasa, lo que les causa un aumento de peso y con ello un daño a la salud.
Un informe elaborado por la agencia Kantar indicó que durante épocas decembrinas, las familias mexicanas gastan cinco por ciento más de lo normal en alcohol y alimentos: mientras que en el recibo de compras totales se identificó un siete por ciento más en comparación con lo que normalmente gastan las personas el resto del año.
Navidad, exceso de tradición y de gasto
Entre los productos que aumentan más su volumen de compra están la cerveza, que a fin de año aumenta en ventas el 52 por ciento; las frutas en almíbar enlatadas con ventas elevadas del 42 por ciento; las cremas lácteas con un aumento del 19 por ciento; el pimiento morrón con un incremento 24 por ciento, entre otros.
“La Navidad es una fuerte tradición, una época de mucho amor, pero también de mucho consumo”, comentó Carolina Segundo, parte del área financiera de Bonanza Asesores. Según la consultora Ernst & Young, el 22 por ciento de los mexicanos tiene pensado gastar en comida para las fiestas y el 14 por ciento comprará alcohol para los festejos.
Carolina Segundo también recalcó que aunque cada año el objetivo es gastar menos durante las festividades de Navidad, siempre se acaba comprando mucho y gastando grandes cantidades de dinero impulsivamente, pues los mexicanos se dejan llevar por las tradiciones, lo que acaba afectando el bolsillo para inicios del próximo año.
Más gasto y más excesos de comida
“Durante la temporada navideña, los excesos en las comidas y bebidas pueden hacer ganar peso a las personas, aumentando los riesgos para la salud”, explicó el Teconológico de Monterrey en su portal Conecta respecto a los excesos de consumo que hay en Navidad y recalcó que las emociones son vitales en el consumo de alimentos.
María Luisa Balli, directora del Instituto Bienestar Integral de TecSalud, afirmó que la comida típica de esta época, los olores, la música y las reuniones familiares traen recuerdos emotivos y emociones poderosas, mismas que al ser tan fuertes respondemos comiendo más y más sin sentir necesariamente hambre.
“Los excesos más comunes en esta temporada son el consumo de alcohol, los panes, los frutos secos y los alimentos ricos en cereales y grasas”, señaló Karen Carranza del Departamento de Bienestar del Tec y subrayó que en cenas navideñas debemos respetar horarios de comida, tratar de servirnos solo una vez y no olvidar la actividad física.
Finalmente, las expertas aconsejaron reconocer emociones como estrés, ansiedad o tristeza y en vez de que haya atracones de comida lo traten con terapia o actividad física; que los platillos se complementen con vegetales; que haya moderación en el consumo de alchol y que se eviten soluciones mágicas como laxantes u otras sustancias.
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