En el mes del Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Mama, 19 de octubre, el doctor Víctor Marín, especialista en ginecología y salud reproductiva, explicó que, según estudios, la deficiencia de vitamina D puede aumentar la proliferación de ese tipo de cáncer, al igual que las posibilidades de desarrollar metástasis.
El cáncer de mama es el tumor más común y la primera causa de muerte entre las mexicanas; al año, arrebata la vida de ocho mil mujeres y de acuerdo con Globocan, en 2020 se diagnosticaron 29 mil 929 casos de cáncer de mama y se registraron siete mil 931 muertes por ese padecimiento en México.
Según expertos, las personas que tienen mayores posibilidades de desarrollar cáncer de mama son las mujeres mayores de 40 años, quienes iniciaron su menstruación antes de los 12 años, quienes tienen antecedentes familiares de la enfermedad, en no haber tenido hijos ni haber amamantado, la obesidad y la menopausia.
El experto recalcó que después de los 20 años, las mujeres deben explorar y revisar constantemente sus senos, para detectar abultamientos, enrojecimiento, dolor, hoyuelos, secresiones o erociones, y después de los 40 es necesaria una mastrografía cada uno o dos años, pues es lo más efectivo para diagnosticar el cáncer.
Vitamina D disminuye el riesgo de cáncer
“El efecto antiinflamatorio de la vitamina D podría estar relacionado con el control de la progresión del cáncer debido a su labor de bloqueo en la producción de células malignas”, destacó el doctor Víctor Marín y recalcó que la vitamina D disminuye el riesgo de que el cáncer se extienda a otros órganos, lo que se conoce como metástasis.
El especialista compartió que los estudios como “La vitamina D y el cáncer de mama: pasado y presente”, “Vitamina D y su papel en el cáncer de mama” y “Explorando el metabolismo y la función de la vitamina D en el cáncer” muestran cómo con niveles adecuados de vitamina D hasta la respuesta a tratamientos contra el cáncer es mejor.
La vitamina D se genera en la piel, cuando las personas se exponen a los rayos del sol; sin embargo, debido al temor de contraer cáncer de piel, las personas ya no se asolean, pero alimentos como el salmón, bacalao, caballa, sardina, yema de huevo e hígado de res también son ricos en ese nutriente.
Finalmente, Marín aseveró que pese a la recomendación de consumir cuatro mil unidades diarias de vitamina D, la mejor manera de evitar el cáncer de mama y acabar con él a tiempo son los chequeos constantes y la realización de estudios como la mastografía.
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