El trazo de la ruta se modificó de último minuto en el tramo 5 como consecuencia de negociaciones entre el presidente y representantes de la industria hotelera de la región.
En la construcción del tramo 5 del Tren Maya, el gobierno federal no ha cumplido con la entrega del Proyecto Ejecutivo ni de la Manifestación del Impacto Ambiental (MIA), denunciaron el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) y la iniciativa Voto por el Clima.
“Antes de iniciar la construcción, el proyecto debió ser sometido a los procedimientos de cambio de uso de suelo que hoy es forestal y debió tomar en consideración los programas municipales de desarrollo urbano que puede haber en regiones como Cancún, Tulum y Playa del Carmen”, dijo Gemma Santana, directora de la Iniciativa Voto por el Clima e integrante de la campaña “Sálvame del Tren”, en entrevista radiofónica con Ciro Gomez Leyva por la mañana.
Explicó que el trazo de la ruta se modificó de último minuto en el tramo 5 como consecuencia de negociaciones entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y representantes de la industria hotelera de la región.
Santana alertó que las vías del Tren Maya podrían caerse en esta zona, pues no se han realizado los estudios geológicos que descarten los riesgos de construir sobre el sistema subterráneo de agua dulce.
“El tramo Cancún-Tulum del Tren Maya iba a construirse sobre la carretera, alrededor de la zona de hoteles, pero ahora se está devastando la selva para construir las vías sobre un territorio donde hay más de cien cenotes y ríos subterráneos, es uno de los lugares con mayor agua dulce del plantea; no hay manifestación de daño ambiental, no hay proyecto ejecutivo, de un día para otro cambiaron el tramo cinco. No estamos en contra del Tren Maya”, puntualizó.
Tramo del Tren Maya que recorre más de 100 kilómetros de vía en el estado de Quintana Roo.
Por su parte, el presidente del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), Gustavo Alanís, explicó que previo a la construcción del tramo 5 del Tren Maya se deberían de analizar los ordenamientos ecológicos del territorio que establecen limitaciones de densidad y altura de las construcción, así como los decretos de Áreas Naturales Protegidas federales y estatales, y el estatus legal de especies de flora y fauna protegidos por amenaza o peligro de extinción.
Alanís criticó que el proyecto del Tren Maya haya sido segmentado para realizar los análisis de su impacto ambiental, cuando la ley dicta que la obra debe someterse en su conjunto a la revaluación.
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