Syngenta, organización que trabaja en la sostenibilidad de la agricultura, aseguró que el reto que existe actualmente es gigante para el ser humano, pues para 2030, se estima que la población aumente mil millones y la demanda de alimento será del doble, por lo que la agricultura y el trabajo de varias áreas para eficientizar es clave.
En entrevista con Yo Influyo, Patricia Toledo, directora de sostenibilidad y asuntos corporativos de Syngenta Latinoamérica Norte, explicó que antes había más hectáreas para producir y menos población, pero ahora la población crece muy aceleradamente y la tierra cultivable se reduce, lo que genera un escenario inquietante y que llama a la acción.
“El planeta ya no da más, entonces en esta misma área de cultivo que ya se tiene debe producirse más ¿Cómo le van a hacer los agricultores? Sólo con tecnología y buenas prácticas”, comentó Toledo y señaló que se debe trabajar para que la agricultura sea más eficiente y en las mismas hectáreas se produzca más alimento, y se recuperen tierras.
Actualmente, la agricultura genera entre el 19 y 29 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero y se estima que el 70 por ciento del agua en el mundo es destinada a la agricultura. Por lo que es vital que los procesos y recursos que existen en ese campo se eficienticen y su impacto sea cada vez menor, sin reducir la calidad.
Agricultores, el centro de la producción
Al respecto, Syngenta detalló que su labor es trabajar de la mano con agricultores y científicos para que la tecnología que existe en todos los campos conocidos por la humanidad, se aplique al campo y en vez de que se gasten recursos por igual y en grandes cantidades, como antes, se apliquen los recursos necesarios en donde se necesitan.
Paticia Toledo, detalló que, la tecnología permite ser más eficiente, lo que beneficia al campo y explicó que, los pilares social, ambiental y económico son vitales para Syngenta. “El agricultor va en el centro”, detalló la vocera de la organización y explicó que por medio de sus programas siempre tratan de beneficiar a los agricultores y su trabajo.
“El agricultor es la parte primaria y quien produce los alimentos, si el agricultor puede generar riqueza y bienestar en su comunidad, esa riqueza se transmite en los eslabones de la cadena”, comentó la experta y agregó que si un agricultor logra cultivar en una hectárea que antes no era fértil, no sólo hay más alimento, también da la oportunidad de que sus hijos reciban mejor educación o de mejorar su comunidad.
Con herramientas digitales como Cropwise y Proagricultor, los agricultores pueden consultar desde sus teléfonos mejores prácticas para el campo o pedir ayuda respecto a plagas, también arrojan cálculos y son desarrolladas en tecnología 3G para que cualquier agricultor, aunque se encuentre en la periferia, pueda hacer uso de la herramienta.
Syngenta, trabaja por los humanos y la naturaleza
Por otro lado, Toledo comentó que uno de los ejes en lo que también trabaja Syngenta es el social y en él se incluye la relación favorable entre agricultores y trabajadores, la eliminación del trabajo infantil, cero discriminación, libertad de negociación, no acoso ni abuso, no trabajo forzado, horas adecuadas de trabajo y compensaciones justas.
De acuerdo con la organización World Vision México, en México hay 3.3 millones de niñas y niños trabajando y según datos de la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil de 2019, tres de cada diez pequeños y adolescentes, o bien el 29.2 por ciento han trabajado en el sector agropecuario. Millones de niños pierden el derecho al estudio por trabajar.
Por otro lado, Andrés Álvarez, director de Investigación y Desarrollo para Latinoamérica Norte, de Syngenta detalló que la ciencia y los procedimientos ayudan ampliamente a los agricultores y en la organización se trabaja con científicos de todo el mundo para desarrollar pesticidas, fungicidas y otros productos para blindar a las plantas.
Finalmente, el experto destacó que uno de los programas más importantes de Syngenta es el Operación Polinizador, con el que se preserva la vida de millones de polinizadores desde el lado científico. Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el trabajo de polinización de las abejas equivale a 163 mil millones de dólares anuales en servicios ecosistémicos.
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