World Vision México celebró que el pasado 16 de enero se aprobara una reforma a la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes y al Código Familiar en San Luis Potosí, la cual prohíbe el castigo corporal y humillante como método correctivo para niños y destacó que prevenir la violencia en la familia en todos los contextos es vital.
Un informe elaborado por WVM arroja que en San Luis Potosí, más del 75 por ciento de las niñas y mujeres perciben su hogar como el principal sitio de violencia contra niños, adolescentes y ellas mismas; además, más del 25 por ciento de los encuestados no consideró los gritos o golpes como violencia contra los menores.
La Ley General de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes establece que el castigo corporal y humillante contra los menores es todo aquel en el que se utilice fuerza física como golpes con la mano u objetos, empujones, pellizcos, mordidas, tirones de cabello u orejas, obligar a los menores a tener posturas o ingerir alimentos que los lastimen o cualquier acto que cause dolor o malestar. El castigo humillante es cualquier trato ofensivo a los pequeños.
Datos al 2021 de WVM indican que en ninguna ley estatal se define qué es el castigo corporal y humillante, y tampoco se considera el derecho de niñas, niños y adolescentes a la orientación, educación, cuidado y crianza; sino que aún se establece el derecho de adultos que cuidan a menores a corregirlos y educarlos evitando el maltrato o violencia.
Además, la institución señaló que durante el último año hubo un aumento en los índices de violencia, mismo que la sociedad también percibió, pues el 62 por ciento de los ciudadanos de la encuesta aseguró que en la entidad aumentaron los casos violentos contra niños, niñas y adolescentes.
“World Vision México hace un llamado a sensibilizar, prevenir, atender casos de castigo corporal y humillante como método correctivo o disciplinario en niñas, niños y adolescentes como modelo de crianza en todos los contextos donde se desarrollan las niñas, niños y adolescentes”, comentó la institución.
“Antes no se veía siempre porque los papás salían a trabajar y los niños en la escuela y por la contingencia estamos en casa y los padres pierden el control y tienden a violentar”, comentó Alexis, quien es un joven de 17 años de San Luis Potosí y que fue encuestado por la institución.
Finalmente, la organización que lleva 40 años trabajando por los derechos de los niños en México, destacó que el castigo corporal y humillante contra menores es una forma de crianza muy arraigada en México, y aunque no hay cifras exactas de los niños que lo sufren, se debe empezar a promover iniciativas para educar con amor y respeto.
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