La lucha efectiva contra la corrupción y la reducción de la impunidad tiene un alto grado de responsabilidad desde el fortalecimiento de las instituciones, señaló Salomé Flores Sierra, oficial nacional de UNODC.
Tras la extradición de España a México de Emilio Lozoya para ser sancionado por actos de corrupción en Pemex, gran parte de la sociedad lo ve más con un distractor que como un avance para castigar los actos de corrupción de gobiernos anteriores. Ante este contexto, especialistas coincidieron que es relevante garantizar y fortalecer el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) para prevenir y erradicar la corrupción de funcionarios públicos.
Durante su participación en el 5to Conversatorio de Alto Nivel. “Relevancia de la Agenda 2030 en tiempos de COVID-19: Paz, justicia e instituciones para no dejar a nadie atrás”. La comisionada del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), Blanca Lilia Ibarra Cadena, planteó que entre los principales retos del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) se encuentra pasar de la homologación de marcos legales a la implementación efectiva, así como del establecimiento de la base de coordinación a la ejecución de respuestas del Estado eficaces en casos de corrupción, “sin burocracia excesiva y sin dilación”.
Por su parte, Eduardo Bohórquez, director ejecutivo de Transparencia Mexicana, afirmó que para fortalecer el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) cada una de las instancias que lo integran deben cumplir con su función, explicó: la Secretaría de la Función Pública, fiscalizar el gasto y sancionar en materia administrativa; la Fiscalía Anticorrupción, investigar los delitos, y los Jueces, sancionarlos.
“El sistema no es nada que no tenga cualquier democracia funcional en el mundo: un conjunto de instituciones que previenen y sancionan la corrupción, las cuales deben coordinarse y asegurar que cuando se traicione la confianza de la sociedad por actos de corrupción se investigue y se sancione apropiadamente”, puntualizó.
Salomé Flores Sierra, oficial nacional del Programa de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), refirió algunas prioridades en la lucha contra la corrupción, entre las que destacó: monitorear acciones de información y sensibilización a la ciudadanía; fortalecer los órganos especializados para sancionar los delitos de corrupción; continuar impulsando la transparencia y la rendición de cuentas, así como redignificar el trabajo policial.
“La lucha efectiva contra la corrupción y la reducción de la impunidad tiene un alto grado de responsabilidad desde el fortalecimiento de las instituciones. Tenemos que asegurar el correcto funcionamiento del Sistema de Justicia Penal; hay que investigar y hay que sancionar”.
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