Según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), instrumento elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el tercer trimestre de 2023 la tasa de participación laboral de las mujeres se estableció en 46.2 por ciento y el organismo arrojó que ha sido el porcentaje más alto desde que se tienen registros.
Los datos de la ENOE comprueban que la participación de las mexicanas se ha recuperado completamente tras la pandemia de COVID-19, cuando los indicios fueron del 40 por ciento y las más afectadas laboralmente fueron ellas, pero de acuerdo con los últimos datos, hubo un aumento de 1.6 puntos porcentuales.
Sin embargo, las mexicanas siguen enfrentando una serie de problemáticas y barreras para poder desempeñarse en materia laboral, pues según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), las tareas del hogar continúan siendo un obstáculo para el desarrollo laboral de las mujeres.
Mujeres continúan en desventaja en materia laboral
En promedio, las mexicanas dedican 43 horas a la semana a realizar tareas del hogar y según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), las tareas del hogar y de cuidados alcanzaron un valor de 7.2 billones de pesos en 2022 y las mujeres fueron quienes realizaron la mayor carga de trabajo no remunerado, como tareas de limpieza y de cuidados.
Además, la posición socioeconómica de las mexicanas influye extremadamente en su desempeño en el mercado laboral, pues las mujeres de clase privilegiada tienen un 58 por ciento de participación; mientras que las chicas que viven en mayores índices de pobreza registran una participación del 29.1 por ciento.
Por su parte, la Asociación Mexicana de Empresas de Capital (AMECH) arrojó que México es uno de los países en donde la tasa de mujeres que buscan participar en el mercado laboral es menor, pues mientras que la tasa en América Latina se ubica en 49 por ciento, México tiene una tasa del 44.3 por ciento, países como Chile y Colombia tienen una tasa mayor.
Norma Godínez, de la AMECH, indicó que “hay mucho que cambiar de raíz para lograr reducir las brechas de género en el mundo laboral” y destacó que aunque ha habido varias iniciativas, las mexicanas aún enfrentan muchas situaciones que las colocan en desventaja en comparación de los hombres.
Los datos arrojados por la ENOE pintan un panorama prometedor para las mexicanas y demuestran el avance que ha existido en materia laboral, pero tanto gobierno como empresas deben seguir colaborando y promoviendo políticas e iniciativas que permitan que todas las mujeres, sin importar situación económica, social o personal, puedan tener un desarrollo profesional óptimo.
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