Debido al origen extranjero de Facebook, Twitter e Instagram el INAI no puede garantizar la protección de tus datos personales que confías en redes sociales.
Ni la Ley Federal de Protección de Datos Personales en posesión de particulares puede proteger los datos que usuarios de redes sociales compartan en las plataformas.
Es decir, dicha normatividad sólo aplica en empresas o sujetos regulados en el territorio mexicano, y no es el caso de las redes sociales como Facebook, Twitter o Instagram cuyas sedes se ubican en Estados Unidos.
Y es que ante las innumerables veces que en redes sociales se han filtrado millones de datos de usuarios no hay quien regule este tipo de prácticas, pues el usuario al aceptar las políticas de privacidad permite el uso de datos.
En su cuenta de Twitter, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) enumera una serie de derechos que posee el usuario de redes sociales.
¿Sabes cuáles son tus derechos como usuario de redes sociales?
Revisa nuestra infografía y compártela. pic.twitter.com/hVhScWbXyn— INAI (@INAImexico) 7 de septiembre de 2018
La red social sólo podrá utilizar los datos personales para otros fines, siempre y cuando previamente ya lo hayas autorizado. En ese sentido, al descargar una aplicación aparece un mensaje previo que da aviso de las funciones a las que requiere tener acceso entre las que incluye identidad, contactos, ubicación, fotografías, entre otros. Cada quien acepta o no las condiciones.
También, según la infografía del INAI, los usuarios tienen derecho a la garantía a que sus datos se mantengan confidenciales y en caso de ser utilizados, sólo sea para fines lícitos. Además, se debe brindar la garantía de conocer las políticas de privacidad.
Pero más allá de derechos, son obligaciones, indicó una operadora del centro de atención y servicio del INAI -mejor conocido como TelINAI. Recomendó que la mejor opción al abrir una cuenta en alguna red social, es revisar la política de privacidad.
Y es que al no existir alguna normatividad sobre la protección de datos en redes sociales debido a su origen extranjero, los “derechos” mencionados se vulneran ya que no hay quien garantice que se cumplan.
Sin respeto a la imagen ajena
De alguna u otra manera las redes sociales forman parte de nuestra vida. Es un mundo virtual en el que los seres humanos encuentran una extensión de su vida social. Pero al momento de oprimir el botón de ‘Compartir’, la información viaja por la red y llega a los dispositivos al otro lado del mundo.
En ocasiones los usuarios comparten material que involucra a alguien más, e inclusive es común ver casos de ridiculización en redes sociales, fotos que no fueron autorizadas y vulneran la dignidad de otro. Es aquí donde entra el derecho a la imagen.
En 2006, en el entonces Distrito Federal se publicó la Ley de Responsabilidad Civil para la Protección del Derecho a la Vida Privada, el Honor y la Propia Imagen en la que en su artículo 17 señala que “toda persona tiene derecho sobre su imagen, que se traduce en la facultad para disponer de su apariencia autorizando, o no, la captación o difusión de la misma”.
Además el artículo 26 señala que la utilización del nombre, voz o imagen de una persona con fines peyorativos, publicitarios o comerciales “dará lugar a la reparación del daño que por la difusión de la misma se genere”.
Las sanciones por la reparación de daño comprenden la publicación de la sentencia condenatoria en el mismo medio en el que fue difundido los hechos, y en caso de que no se pueda resarcir el daño la indemnización puede llegar hasta los 26 mil pesos mexicanos. Bajo ninguna condición será objeto para privar la libertad de las personas.
Numeralia
Según el estudio de Hábitos de Usuarios de Internet en México de la Asociación Internet.mx, el total de internautas mayores de seis años en nuestro país en 2018 fue de 82.7 millones de personas.
En el uso del internet predomina el acceso a las redes sociales, seguido del uso de servicios de mensajería y llamadas; y la búsqueda de información.
Te puede interesar: Para cuidar el ambiente no basta renunciar a los popotes