El padre Bravo tuvo que ser intervenido quirúrgicamente por perforación del intestino grueso.
Por intentar robar la colecta de una parroquia en la ciudad de Trinidad en Bolivia, el sacerdote Adán Bravo de 78 años fue apuñalado resultando herido de gravedad.
Los atacantes ingresaron a las instalaciones de la Parroquia de la Santa Cruz, del Vicariato Apostólico de Beni, el pasado domingo 6 de enero hacia las once treinta de la noche. Un diario local informó que tres personas ingresaron a la parroquia y uno de ellos lo hirió.
El sacerdote quien ejerce su ministerio desde hace 50 años, se resistió al robo y logró evitar que los asaltantes se llevaran el dinero pero fue herido con un arma blanca con dientes de sierra.
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Los vecinos se percataron de ruidos en la parroquia, en tanto el sacerdote pudo encender la luz por lo que pudieron observar que sangraba del abdomen y observaron también salir al agresor por la puerta principal del templo, aunque en principio pudo huir fue retenido cuadras más adelante por ciudadanos, el presunto responsable cuenta con 21 años y responde al nombre de Javier Cuéllar.
El sacerdote fue ingresado al Hospital Obrero donde fue intervenido oportunamente, pues su intestino grueso fue perforado por el arma utilizada en su contra. La operación fue exitosa y el padre Bravo comenzó su recuperación.
El padre Bravo es el primer sacerdote diocesano del Vicariato y es responsable de la parroquia donde fue agredido y así como del Santuario de Loreto.
Con información de ACI Prensa.
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