En lo que va de la administración de Donald Trump, el número de mexicanos deportados podrá llegar a la cantidad de 400 000 en diciembre de este año.
Con la llegada de la administración de Donald Trump, en enero de 2017 y hasta diciembre de 2018, habrán sido deportados de Estados Unidos más de 400 000 mexicanos, señaló la coordinadora de Agenda Migrante, Eunice Rendón.
Precisó que sólo de enero a agosto de este año, suman 120 000 los connacionales que han sido deportados, y se pronostica un cierre de casi 200 000, cantidad similar a la de 2017 con 220 000. La información está sustentada con cifras oficiales de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación.
Rendón resaltó que “si las sumas (las deportaciones de 2017 y 2018) son poco menos de 400 000 deportados durante la era Trump si nos vamos hasta diciembre de este año”.
Mencionó que anteriormente una persona que era deportada e intentaba reingresar a territorio norteamericano se le imponía alrededor de tres meses de prisión; en la administración de Trump “subió a casi tres años de prisión, lo cual ha desalentado el ingreso a los Estados Unidos”.
Rendón Cárdenas añadió que el ingreso a esta nación ha disminuido casi en 60% debido a las amenazas racistas y xenófobas que mantiene el gobierno de Donald Trump.
En este contexto y al hablar del nuevo Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá, la también exdirectora del Instituto de Mexicanos en el Exterior (IME), dijo que la presente administración se enfocó más en el tema económico y se dejó de lado el tema migratorio, situación que debería retomar el gobierno del presidente electo.
“Tendría que haber un contrapeso del gobierno mexicano en los temas de seguridad que es en donde ayudamos de manera importante a los Estados Unidos, para que justo ahí pudiera negociarse un mejor trato a migrantes ante el gran número de deportaciones y maltrato”, señaló.
En su opinión, la administración lopezobradorista deberá poner el tema migratorio al centro de la relación bilateral, “eso no lo hemos visto y tampoco lo tenemos muy claro con el próximo canciller, Marcelo Ebrard, porque tampoco se ha visto muy interesado con el tema”.
