En una noticia insólita el día de ayer nos enteramos de que sí hay un secretario de Salud, es un señor mayor de nombre Jorge Alcocer, es decir, el criminal serial López Gatell tiene, por lo menos nominalmente, un jefe que se presentó ayer en la mañanera como secretario de Salud, por lo menos de eso cobra.
Este señor le confirmó a los mexicanos lo que muchos ya sabíamos y temíamos a López le vale madres tu salud, no le interesa, no se ocupa de ella y no quiere gastar un quinto en cuidarla. ¿Por qué lo digo?, porque este señor que dice ser secretario de Salud dijo que para la vacunación contra covid en la próxima temporada 2023-2024, en México se aplicarán las vacunas Abdalá y Sputnik, sí Alcocer, este señor que tú no conoces, pero que yo te digo que es secretario de Salud, explicó que el objetivo es vacunar a casi 25 millones de personas y que en este momento el gobierno cuenta con cinco millones de dosis de la vacuna cubana Abdalá almacenada por Birmex.
Además de que entre octubre y noviembre llegarán al país cuatro millones de dosis de la vacuna Sputnik, la rusa que está en reserva y que será necesaria la adquisición de 10 millones de dosis para completar la vacunación covid.
Esto tiene muchas implicaciones muy graves que consulté ayer con dos grandes y muy reconocidos expertos de este país. La primera implicación y la más importante es que estas dos vacunas no cuentan con la validación de la Organización Mundial de la Salud, básicamente porque fueron creadas en dos países que son mundialmente famosos por la opacidad en el desarrollo de medicinas y de cualquier avance médico. Segundo, me dicen los expertos en el mejor de los casos esas vacunas se desarrollaron para el virus original de covid-19 que ha mutado en distintas ocasiones motivo por el cual las grandes farmacéuticas del mundo, las más serias, han generado nuevas vacunas muy lejanas a las iniciales.
Esto quiere decir que su eficacia, si es que existe, es muy limitada para las necesidades de hoy y, por lo tanto, la protección que ofrece el gobierno a la población es muy limitado.
Esto tiene además otras implicaciones que platiqué el día de ayer con estos dos reconocidos expertos: la primera es que se seguirá abriendo la brecha social en materia de salud entre pobres y quienes tenemos la fortuna de contar con medios para acudir a otro país a ponernos un refuerzo real y eficaz contra este canijo y quienes no cuentan con estos medios y tienen que conformarse con el paliativo que ofrece el gobierno. Esto es muy grave en términos sociales; pero también en términos médicos porque son justo las personas más pobres de México las que enfermarán de covid y hoy carecen de seguridad social porque el gobierno se las quitó con el Seguro Popular y si se enferman serán quienes tengan que rogar por un lugar en algún espacio público de salud que hoy carecen de medicinas y lugares de atención adecuada.
Pero también tiene implicaciones geopolíticas. Empiezo con la vacuna cubana. Comprar la vacuna Abdalá implica financiar a un régimen dictatorial opresor y violento que utiliza esos recursos para pagar la represión y mantener el poder a costa de lo que sea. Es decir, cuando el gobierno mexicano paga esta vacuna con tus impuestos, financia la represión en Cuba con tus impuestos, así de claro.
Por otro lado, adquirir la vacuna Sputnik de Rusia implica violar abiertamente el bloqueo económico internacional que el mundo desarrollado el impuesto a Rusia por la criminal invasión a Ucrania. Es decir, cuando el gobierno paga con tus impuestos esta vacuna está ayudando a Rusia a una invasión criminal.
Pero los expertos me dejan además unas preguntas clave ¿se van a utilizar vacunas cubanas y rusas almacenadas en México? ¿Cómo se almacenaron? ¿No están caducas? ¿Cómo se decidirá quién las recibe y por qué medios? La irresponsabilidad criminal llevada a los peores extremos
Me confirman, además, que varias empresas que fabrican las vacunas buenas han rogado prácticamente a Cofepris para que les permitan comercializarlas en México y se han topado con un muro. ¿Por qué? Porque vienen las elecciones de nuevo y López y Morena quieren volver a vender la vacuna como un regalo de López.
¿Cuánto dinero de los mexicanos le hemos pagado a Rusia y a Cuba por estas vacunas viejas y no aprobadas? ¿Cuándo conoceremos esos montos? Las condiciones, las razones y los beneficiarios de estos multimillonarios y oscuros negocios entre México, Rusia y Cuba ¿Qué hubiera hecho un buen presidente? Ni siquiera sé por dónde empezar, pero sugiero que un buen presidente desde el principio de la pandemia se habría tomado como prioridad principal la salud de los mexicanos y no las elecciones; y sí se hubiera encargado de que las mejores vacunas del mundo estuvieran la disposición y a la mano de todos los mexicanos en los momentos y en las cantidades y adecuadas con los protocolos adecuados para atender la salud y no para ser política electorera e internacional a costa de la salud de todos los mexicanos.
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