Una inadecuada gestión del espacio aéreo pone en riesgo la seguridad y la vida de personas, pero también la actividad turística que para este año tiene prevista una derrama económica de más de 35 millones de dólares por vuelos hacia México.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) urgió a tomar medidas en las que “prive la sensatez y el diálogo” para “resolver la gran crisis relacionada con la gestión del espacio aéreo” a fin de mitigar el riesgo de accidentes y asegurar la recuperación económica y turística del país generada por la actividad aeronáutica.
El organismo empresarial, dirigido por José Medina Mora Icaza, mostró su preocupación por los 100 incidentes sucedidos de diciembre de 2021 a marzo de 2022 relacionados con la gestión del espacio aéreo, cuatro meses en los que estos pudieron tener desenlaces fatales.
Asimismo, indicó que la gestión del espacio aéreo en el país, particularmente en la Zona Metropolitana del Valle de México, enfrenta una grave crisis que pone en riesgo la seguridad y la vida de usuarios y trabajadores de aviación, pero no sólo eso sino, también la probable afectación a las empresas de aviación y a la actividad turística, la cual para este año tiene prevista una derrama económica de 35 mil 185 millones de dólares por vuelos hacia el país, de acuerdo a pronósticos de la propia Secretaría de Turismo.
La Coparmex recordó que desde 2018 MITRE, centro de investigación sin fines de lucro especializado en temas de aviación, advirtió que la operación simultánea de tres aeropuertos en el Valle de México, el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) y el de Toluca, requeriría la creación de un espacio aéreo ‘sumamente complejo’, “advertencia que fue ignorada”, subrayó.
Asimismo, alertó que “la reconfiguración del espacio aéreo puede convertirse en mucho más problemática en la medida en que la frecuencia de operaciones en el AIFA se incremente y, por ende, los riesgos también vayan al alza si es que no hay acciones decididas y técnicamente fundadas para solucionar esta delicada situación”.
Por esta razón, la Coparmex pidió a las autoridades que no se minimice o se improvisen decisiones ante un contexto tan delicado en el que están en juego vidas, así como la imagen internacional de México.
En su publicación oficial Señal, el organismo patronal relató que en mayo de 2021 rebajó la calificación de seguridad aérea de México de categoría uno a categoría dos al considerar que no se cumplía con los estándares internacionales mínimos de seguridad en varias áreas.
La Administración Federal de Aviación (FAA, en sus siglas en inglés) llevó a cabo una auditoría a la Agencia Federal de Aviación Civil mexicana (AFAC) de octubre de 2020 a febrero de 2021 y emitió 28 recomendaciones al gobierno mexicano para corregir las deficiencias.
Desde ese momento se advirtió que había serios problemas en materia de conocimiento técnico, número insuficiente de inspectores aéreos, falta de personal cualificado o con suficiente experiencia, mantenimiento de registros, procedimientos de inspección y resolución de preocupaciones de seguridad, pero “los recientes incidentes en el AICM revelan que el problema no sólo no ha sido atendido, sino que se ha profundizado”, resaltó.
Como consecuencia de la rebaja de calificación de seguridad aérea las aerolíneas mexicanas sufrieron limitaciones como la posibilidad de operar nuevas rutas o agregar más aviones hacia EUA, situación que está lejos de cambiar por el impacto de los recientes incidentes y su crecimiento en número, lo que ya ha repercutido negativamente en el mercado para las aerolíneas nacionales, además de que persiste latente el riesgo de un accidente que derive en pérdida de vidas, por lo que la Coparmex urgió a atender sin demora esta situación.
A fin de aportar soluciones a esta problemática, la Coparmex consideró que es necesario trabajar en cinco ámbitos, comenzando con la capacitación de los controladores aéreos a fin de que cuenten con una adecuada y profesional instrucción, no con cursos en línea sin supervisión adecuada.
Por otra parte, indicó que se requiere que se mejoren las condiciones laborales que contemplen salarios bien remunerados, condiciones de descanso suficiente, así como un buen ambiente laboral.
Otro de los puntos fundamentales, según el organismo empresarial, es contar con un número de personal suficiente, “la austeridad no debe ser el argumento para recortes, no contrataciones o sobrecargas de trabajo que ponen en riesgo vidas humanas”, advirtió.
Asimismo, resaltó que son indispensables estudios técnicos profundos y certificaciones internacionales que abonen a generar certidumbre sobre la gestión del espacio aéreo, e incluso en caso de ser necesario, replantearse ante la orografía, condiciones climáticas adversas y la cercanía entre tres aeropuertos que se pretende operen de forma simultánea.
Por último, señaló que se requiere invertir en infraestructura que permita la operación con tecnología satelital y comunicación, entre torres de control y aeronaves, así como para la mejor organización en tierra.
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