“Ante la severa crisis actual exigimos prudencia y altura de miras. No se debe sucumbir ante ánimos populistas contrarios a la realidad económica. El resultado podría ser la pérdida de más empleos”: Coparmex.
La Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) anunció el incremento de 15 por ciento al salario mínimo a partir del 1 de enero de 2021, con lo cual pasará de 123.22 pesos diarios a 141.70 pesos; mientras que en la Zona Libre de la Frontera Norte será de 185.56 pesos diarios a 213.39 pesos.
Por un sólo voto a favor el Consejo de Representantes de la Conasami, conformada por 23 integrantes (11 representantes de los trabajadores, 11 de los patrones y uno del gobierno federal), dio luz verde al aumento con el porcentaje propuesto por el presidente López Obrador apenas el jueves 10 de diciembre, quien dijo que el incremento debía ser del 15 por ciento toda vez que argumentó que el salario mínimo que había en México era una “vergüenza” al compararlo con el de otros países.
En respuesta a esta propuesta, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) pidió al jefe del Ejecutivo que el gobierno federal hiciera una aportación gubernamental extraordinaria ante la emergencia por COVID-19 y así alcanzar un incremento agregado del 15 por ciento.
“Eso implicaba un esfuerzo tripartito, prudente y acorde a la realidad. Sin embargo, el gobierno federal no quiso poner nada. Tal y como lo ha hecho desde el inicio de la pandemia, el presidente de la República no accedió a realizar aportación alguna para mejorar la calidad de vida de los trabajadores y preservar los empleos”.
Desde finales de noviembre, el sector empresarial a través de la Coparmex se había pronunciado por un aumento del 10 por ciento, considerando la situación económica actual, y con este tope se sentó a negociar, por lo que ninguno de los 11 representantes de la iniciativa privada avaló el incremento del 15 por ciento, consistente en la modificación porcentual de 6 por ciento y del Monto Independiente de Recuperación (MIR) de 10.46 pesos.
Las razones de la IP
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) expuso que las circunstancias prevalecientes en la economía son graves y pueden empeorar. Destacó que el riesgo de que se aceleren e incrementen los contagios de COVID-19 podría generar el cierre de empresas, lo que repercutiría en la pérdida de fuentes de trabajo, además afirmó que “el tamaño de la caída del Producto Interno Bruto (PIB) no tiene precedentes bajo las técnicas estadísticas modernas”.
La cúpula de organismos empresariales aseguró que “el sector patronal mantiene firmemente el compromiso de seguir impulsando la recuperación del salario mínimo general, pero sobre todo combatir la pobreza laboral que se ha incrementado con la pandemia”.
Frente a este panorama, el CCE aseguró que el incremento del 15 por ciento perjudicaría de manera particular a las micro y pequeñas empresas, haciendo inviable la sobrevivencia de muchas de ellas. “Estas son quienes, en razón de su debilidad económica, cubren mayormente cantidades cercanas al salario mínimo general. Son ellas las principales generadoras de empleo en México y quienes enfrentan problemas mucho mayores, comparados con los que enfrentan las grandes empresas, pues no tienen las opciones de liquidez, créditos ni el acceso a financiamiento que sí tienen las grandes. Más aún, un incremento como éste no sólo frenaría los propósitos de formalizar las actividades, sino que fomentaría la informalidad a costa de la productividad”.
#Comunicado | Las organizaciones del sector privado, en estos momentos tan difíciles de la pandemia, hacen un llamado a proteger el empleo y combatir la informalidad. pic.twitter.com/Yomtkgwh05
— CCE (@cceoficialmx) December 17, 2020
Por su parte, la Coparmex recordó que desde 2016 impulsó una Nueva Cultura Salarial a fin de avanzar hacia la línea de bienestar familiar, la cual consiste en que el ingreso de dos personas ocupadas en la formalidad sea suficiente para mantener a una familia promedio mexicana de cuatro integrantes.
“La meta de la Nueva Cultura Salarial no ha perdido vigencia, pero ante la severa crisis actual exigimos prudencia y altura de miras. No se debe sucumbir ante ánimos populistas contrarios a la realidad económica. El resultado podría ser la pérdida de más empleos”, subrayó.
Finalmente, el sindicato patronal sentenció que sin consensos entre los sectores, y con la irracionalidad en la conducción económica, no se puede recuperar el crecimiento y el desarrollo con bienestar.
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