El Día Internacional de los Datos Abiertos es una fecha significativa que se celebra cada año con la finalidad de promover la transparencia, el acceso a la información y la participación ciudadana. En este año la conmemoración abarcará del 1 al 7 de marzo, fechas en las que alrededor del mundo se busca concienciar sobre la importancia de los datos abiertos, fomentar su uso responsable y destacar cómo pueden contribuir al desarrollo social, económico y político.
Los datos abiertos se refieren a la información que cualquier persona puede utilizar, reutilizar y compartir libremente, sin restricciones legales o técnicas. Esta información, proporcionada en formatos accesibles y comprensibles, permite que ciudadanos, investigadores, organizaciones y empresas la utilicen para diversos fines.
Su importancia es fundamental en varios sentidos como:
Transparencia y rendición de cuentas: Los datos abiertos permiten a los ciudadanos acceder a información gubernamental, lo que fomenta la supervisión de las acciones públicas y reduce las posibilidades de corrupción.
Innovación y desarrollo económico: Las empresas y emprendedores pueden utilizar los datos abiertos para desarrollar nuevos productos, servicios y soluciones tecnológicas que mejoren la calidad de vida.
Participación ciudadana: Al tener acceso a la información, los ciudadanos pueden involucrarse en la toma de decisiones y proponer soluciones a problemas comunitarios.
Eficiencia gubernamental: Los gobiernos pueden mejorar la prestación de servicios, optimizar recursos y responder de manera más efectiva a las necesidades sociales al utilizar y compartir información pública.
Un paso para adelante… muchos hacia atrás
En la época contemporánea México fue gobernado por un solo partido durante 70 años por lo que los datos abiertos era una quimera ya que las autoridades podían manejar los recursos de manera discrecional, sin embargo, una vez que la alternancia se hizo realidad en el país, surgieron organismos autónomos que como el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI) tenía la encomienda de obligar a todas las dependencias federales de México a transparentar el uso de sus recursos, así como el qué, el cómo y el porqué de sus acciones.
Años más tarde, sus tareas se ampliaron de sólo garantizar el de acceso a la información pública, se amplió a también proteger los datos personales de los ciudadanos, por lo que inclusive transformó su nombre y siglas a Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai).
Gracias a su labor, los ciudadanos que los solicitaran conocieran por parte de cualquier autoridad en el ámbito federal, órganos autónomos, partidos políticos, fideicomisos, fondos públicos y sindicato; o cualquier persona física, moral que recibiera y ejerciera recursos públicos o realizara actos de autoridad entregara información pública.
Además, garantizaba el uso adecuado de los datos personales, así como el ejercicio y tutela de los derechos de acceso, rectificación, cancelación y oposición que toda persona tiene con respecto a su información.
Beneficios que incomodaron al expresidente Andrés Manuel López Obrador quien bajo el pretexto de que era muy caro sostener al Inai, emitió una reforma para desaparecer este órgano autónomo, lo que fue aprobado por el Congreso de la Unión avalado por Morena y sus aliados.
En su lugar, el propio gobierno federal absorberá sus funciones por lo que se convertirá en juez y parte generando la duda razonable de dar un acceso limitado a la información con retrasos o bloqueos en la entrega de datos solicitados por los ciudadanos.
En cuanto a los riesgos para la protección de datos personales la desaparición del Inai podría debilitar los mecanismos para salvaguardar la privacidad de los ciudadanos.
Diversas organizaciones de la sociedad civil e integrantes de partidos políticos de la oposición han advertido que la desaparición del Inai representa un retroceso de más de dos décadas en materia de transparencia y rendición de cuentas en el país y ahora se tiene la sospecha de que habrá opacidad en varias actividades del Estado.
El jueves 27 de febrero en comisiones del Senado las comisiones unidas de Gobernación y de Estudios Legislativos Primera avalaron por 20 votos a favor y siete en contra, el dictamen que tiene por objeto homologar reglas, principios, bases, procedimientos y mecanismos en el ejercicio del derecho de acceso a la información pública; además, rediseña las autoridades responsables de garantizar ese ejercicio.
De esta manera, las atribuciones del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), pasarán a la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno.
La secretaría también tendrá la atribución para regular la Plataforma Nacional de Transparencia; además, se crea el órgano administrativo desconcentrado de la Secretaría Anticorrupción y Buen Gobierno, denominado Transparencia para el Pueblo.
Al respecto, Rolando Zapata Bello, del PRI, consideró que en asuntos de transparencia no es correcto que el gobierno sea juez y parte. “Creemos que no es sano, ni para el gobierno ni para la ciudadanía, tener en casa a quienes deban revisar lo que sucede en las dependencias gubernamentales”, precisó.
Mientras que Ricardo Anaya Cortés, del PAN, dijo que preocupa mucho lo que hoy se discute porque “se avanza hacia un régimen autoritario de concentración de poder. El Inai era un órgano autónomo e independiente del gobierno, ahora el gobierno será juez y parte. Esto no es un paso hacia adelante y por eso votaremos en contra”.
El Día Internacional de los Datos Abiertos subraya la importancia de garantizar el acceso libre y transparente a la información pública. En el caso de México, la desaparición del Inai representa un desafío significativo para la democracia y los derechos ciudadanos. Es fundamental que la sociedad civil, las organizaciones y los ciudadanos continúen exigiendo transparencia y rendición de cuentas para asegurar que el acceso a la información permanezca como un derecho fundamental e inalienable.
¿Crees que el gobierno se manejará con la misma eficiencia que el Inai?
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