Los ataques cibernéticos generan importantes pérdidas económicas a nivel mundial, paradójicamente hay un déficit de más dos millones de puestos de trabajo en ciberseguridad a nivel global.
El costo de los ataques cibernéticos en México del que han sido blanco más de 82 por ciento de instituciones públicas y privadas, asciende a más de 8 mil millones de dólares, por lo que es urgente tomar acciones que prevengan estos delitos que se realizan a través de las nuevas tecnologías, aseguró Érika Mata Sánchez, directora de la División de Seguridad de la Información y Ciberseguridad de la Universidad de las Américas de Puebla (UDLAP).
Por otra parte, Claudia Feregrino Uribe, investigadora del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) aseguró que en México hay un déficit de 38 mil puestos de trabajo en ciberseguridad, lo que significa un grave riesgo, pero al mismo tiempo representa un enorme nicho de oportunidades para formar expertos en la materia, realizar investigación y ofrecer servicios a la industria.
A fin de hacer conciencia de la importancia de implementar los mecanismos para detectar, defender y responder a los ataques de seguridad en los sistemas informáticos, proteger los datos de instituciones y usuarios, realizar intercambio de conocimiento en la materia y coadyuvar con las autoridades en el combate de delitos asociados, se llevará a cabo el Tercer Congreso de Ciberseguridad e Inteligencia 2019, el 3 y el 4 de octubre en la Ciudad de México, anunció Érika Mata, coordinadora del evento.
Por otra parte, Feregrino Uribe informó que el INAOE organiza por segundo año consecutivo la Reunión de Ciberseguridad para la Industria 4.0, la cual se llevará a cabo del 7 al 9 de octubre, y que tiene como objetivo acercar a los profesionistas de la industria con los de la academia para discutir y presentar los avances en materia de ciberseguridad, además de facilitar el intercambio y consolidar proyectos conjuntos.
Además, el INAOE cuenta con un posgrado dirigido a la industria que ya pertenece al Padrón de Posgrados de Calidad (PNPC) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y ha creado un laboratorio especializado en el tema.
Manejo de dinero por el ciberespacio
El ciberespacio es utilizado cada vez más para realizar transacciones económicas, ejemplo de ello es que las ventas por esta vía en México se han incrementado año con año, según la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) en tan sólo un año aumentó de manera importante el intercambio comercial por este medio el cual fue de 7 por ciento en 2017 incrementándose a 38 por ciento en 2018, tendencia que sigue creciendo.
Además del comercio, a través de este medio se realizan diversos movimientos bancarios. Para el 30 de septiembre se tiene previsto que arrancará la operación del Cobro Digital (Codi) que es una forma de cobro digital que hará uso del Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios (SPEI), que permite realizar en cuestión de segundos pagos electrónicos a través de internet o la banca móvil.
Esta plataforma, que se concretará como una extensión del SPEI, se podrán realizar transferencias de dinero de forma inmediata las 24 horas, los 365 días del año y estará abierto a todo usuario que lo desee. El CoDi usará el código de barras bidimensional Quick Response (QR) y la tecnología NFC (comunicación de campo cercano) se basa en la transmisión de datos e información, con el solo hecho de aproximar dos dispositivos móviles entre sí (usualmente celulares y terminales punto de venta), lo que permitirá que tanto comercios como usuarios, puedan realizar transacciones sin dinero en efectivo.
Por ello, se prevé que en muy poco tiempo se acrecienten las transacciones económicas a través del ciberespacio, y por esto también es la urgencia de contar con mejores mecanismos que permitan identificar posibles riesgos y vulnerabilidades en seguridad informática, prevenirlos y, en caso de que hayan sucedido, corregirlos.
Cerrar el círculo
Garantizar la seguridad del dinero y datos personales de quienes utilizan los medios cibernéticos para comprar, vender o realizar otro tipo de transacciones comerciales o bancarias requiere, además de medidas tecnológicas y personal capacitado y especializado, de garantías legales.
En junio del este año, en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, la diputada Julieta Macías Rábago y el senador Clemente Castañeda, de Movimiento Ciudadano, presentaron una iniciativa con Proyecto de Decreto en la que propusieron elevar a rango constitucional la obligación del Estado de generar condiciones de Ciberseguridad y Protección de los Datos Personales.
En la exposición de motivos del dictamen, los legisladores destacan que en México, de acuerdo con la Policía Federal, se ha detectado 5 mil 549 sitios apócrifos que usurpan la identidad de instituciones financieras y gubernamentales, con la finalidad de realizar fraudes.
“Al establecer a nivel constitucional la obligación de las autoridades de desarrollar una estrategia de seguridad cibernética para reducir los delitos cibernéticos, se garantizará que se brinde un mejor aprovechamiento a las nuevas tecnologías y que la adaptación de éstas a la vida diaria sea de una forma más fácil y efectiva”, indicaron en el proyecto entregado.
El senador y la diputada de Movimiento Ciudadano sostienen que a pesar de que la Constitución establece de forma general la garantía de estos derechos, en el artículo 6, “por la relevancia social y económica de las actividades a través de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), se genera la necesidad de contar con una legislación pertinente, que garantice la adecuada evolución de las relaciones sociales en masa por medios tecnológicos, la seguridad cibernética y el desarrollo tecnológico en el país”.
El trabajo que los legisladores tiene que realizar en este rubro es urgente y necesario, pero además debe realizarse de manera fina y cuidadosa para blindar la seguridad de los usuarios e instituciones que utilizan las TIC.
Te puede interesar: Cuidado con los ciberataques