México tiene más de 123 millones 600 mil habitantes, de los cuales 51.3 por ciento son mujeres y 48.7 por ciento hombres, a pesar de ello las oportunidades entre unos y otros no son las mismas ni las puertas se abren igual, sin importar las capacidades o destrezas que se posean, así como tampoco pesan lo suficiente los legítimos méritos que se tenga.
Abrir brechas ha sido un sinuoso y largo camino para las mujeres en el mundo y en nuestro país, y a pesar de los esfuerzos aún para muchas hay espacios cerrados, no todas tienen acceso a la educación, no todas ganan lo mismo que sus pares hombres en el plano laboral, no todas pueden ocupar una candidatura ni un cargo dentro de la administración pública.
Después de muchos años e intentos por lograr equilibrar justamente la balanza de oportunidades, el 14 de mayo los senadores aprobaron por unanimidad reformas a los artículos 2, 4, 35, 41, 52, 56, 94 y 125 de la Constitución en materia de paridad de género, con lo que se garantizará la presencia de las mujeres en un 50 por ciento en el ámbito público en los tres poderes de la unión, en los tres niveles de gobierno y en los órganos autónomos.
Con estas reformas el Estado está obligado a garantizar que tanto en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el Gabinete presidencial, los organismos autónomos, los espacios en el cámaras federal y locales esté integrada por el 50 por ciento de integrantes del sexo femenino.
Predominio masculino
A pesar de que ahora las mujeres han logrado conquistar importantes espacios públicos, todavía se puede mejorar: las cifras hablan por sí mismas. Basta mencionar que de los integrantes de las 19 secretarías federales nombrados por el presidente de la República, ocho son mujeres y 11 hombres.
De los 11 ministros en la SCJN, 9 son hombres; de 876 magistrados de circuito 714 son hombres y de 581 Jueces de Distrito 444 son hombres. De igual forma en el Consejo de la Judicatura Federal de 7 integrantes 5 son hombres.
Según datos del Censo Nacional de Impartición de Justicia federal 2018, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), existen 48 125 servidores públicos adscritos al Poder Judicial de la Federación, con 23 030 hombres y 22 589 mujeres.
Otro dato revelador es el de que tan solo Claudia Pavlovich, de Sonora, y Claudia Sheinbaum, de la CDMX, están al frente del gobierno de un Estado, una tercera era Martha Érika Alonso, de Puebla, pero después de su deceso ninguna mujer compitió como candidata a gobernadora.
Kenia López Rabadán (PAN) fue la primera senadora de la LXIV Legislatura en presentar una iniciativa de ley para que en todo el país la paridad de género sea obligatoria en los diversos órdenes públicos y en organismos autónomos. Para la legisladora “la visión de género no significa una visión de mujeres, la visión de género significa una complementación de hombres y mujeres”.
La diputada Ximena Puente de la Mora del PRI aseguró que con esta reforma México se convierte el primer país en donde se reconoce este principio de paridad a nivel constitucional.
Después de que el Senado envió al Congreso de la Unión la minuta en materia de paridad de género, el jueves 23 de mayo los diputados federales la aprobaron por unanimidad en lo general y particular con 445 votos a favor, cero en contra y ninguna abstención. Estas reformas fueron enviadas a los congresos de los estados para su análisis y eventual aprobación.
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