La violencia con el que un sector de mujeres se ha manifestado a lo largo del país con motivo del Día Internacional de la Mujer no puede ser la bandera que distinga al movimiento feminista, sino que la agenda de las mujeres debe estar encaminada a la lucha por políticas públicas que brinde al sector femenino seguridad, justicia, educación, trabajo y opciones de vida, aseguraron integrantes del colectivo Mujeres Libres y Soberanas.
“Actualmente, en México hay agendas prioritarias a resolver: la economía de las familias mexicanas que está en grave declive, la violencia que ha alcanzado niveles históricos en toda la República, el sistema de salud insuficiente, una educación ideologizada y deficiente, entre otros. Sin embargo, en los últimos años la agenda de las mujeres se ha visto fraccionada, dividida y reducida a temas que brindan un nulo desarrollo al movimiento como la invitación a la violencia y la promoción del aborto”, abundaron.
En conferencia de prensa, Pilar Vázquez Calva, Alison González, Marcela Errecalde y Paulina Mendoza puntualizaron una serie de problemas sociales y económicos que urgen atender toda vez que son los que mayormente afectan a las mujeres mexicanas y sin embargo han quedado relegados en las políticas públicas.
Pilar Vázquez Calva dijo que actualmente, en México hay agendas prioritarias a resolver: la economía de las familias mexicanas que está en grave declive, la violencia que ha alcanzado niveles históricos en toda la República, el sistema de salud insuficiente, una educación ideologizada y deficiente, entre otros.
Sin embargo, señaló que en los últimos años la agenda de las mujeres se ha visto fraccionada, dividida y reducida a temas que brindan un nulo desarrollo al movimiento como la invitación a la violencia y la promoción del aborto.
En tanto, Alison González destacó que la raíz de la injusticia en el país es la corrupción y la impunidad que se vive día a día, como lo señala el Índice Global de Impunidad México 2022. Además, los problemas estructurales de las instituciones de seguridad y justicia a nivel estatal prevalecen: las entidades no tienen instituciones especializadas de investigación expertas, independientes y con capacidades suficientes para atender el delito de homicidio. Y los ministerios públicos estatales siguen sufriendo un deterioro estructural y de sus capacidades humanas frente al aumento de los delitos y de la población en el país.
En lo que se refiere a la seguridad económica, las integrantes de la organización no gubernamental mencionaron que de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el 52 por ciento de la población en situación de pobreza son mujeres.
Respecto a la violencia, recordaron que según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en 2021 a nivel nacional, del total de mujeres de 15 años y más, 70.1 por ciento experimentó al menos un incidente de violencia. Y de acuerdo a Euronews en 2022 tuvieron lugar más de mil feminicidios, lo que no incluye a todas las mujeres muertas de forma violenta, que sumaron más de tres mil.
Por otra parte, Paulina Mendoza refirió que la atención a la salud de las mujeres sigue siendo uno de los grandes pendientes del Estado, como lo demuestran datos del Inegi que indican que los problemas cardiacos, la diabetes mellitus y los tumores malignos son las principales enfermedades que causan la muerte entre el sector femenino. Ante esta situación, urgieron a que se diseñen políticas públicas y se destinen recursos para su prevención y seguimiento.
Además, enfatizaron que “lejos de propiciar condiciones óptimas para el ejercicio de la maternidad, nos estamos empezando a enfrentar al debate de que nuestros vientres sean comercializados y explotados”.
Ante estas cifras, a nombre del colectivo Paulina Mendoza aseguró que “el Estado nos sigue fallando a todas las mujeres mexicanas. Exigimos nuevamente este 8 de marzo que se den soluciones expeditas a los dos temas que carcomen nuestro sistema de justicia: la corrupción y la impunidad”.
Recalcó que la agenda de las mujeres no puede reducirse al tema del aborto, “porque el aborto es violencia y no resuelve de ninguna manera la problemática de la mujer embarazada en desamparo y mantiene el movimiento de mujeres dividido y confrontado”.
Marcela Errecalde sostuvo que desde hace más de un año han denunciado otra gran amenaza al interior del movimiento de mujeres, que es la imposición de la agenda transgénero que pretende borrarlas la esencia y presencia de todos los espacios, acaparando nuestros derechos como mujeres.
“Urgimos como mujeres unificar nuestro movimiento priorizando nuestras verdaderas necesidades, no dejando que intereses extranjeros o de grupo sigan siendo los que nos dividan e impidan nuestro avance”, subrayó.
Al mismo tiempo exigió soluciones a las problemáticas de salud, seguridad, economía y justicia que afectan la vida y el desarrollo de quienes conforman el sector femenino en el país.
El colectivo Mujeres Libres y Soberanas hizo un llamado a todas las mujeres para poder unirse en las coincidencias, respetarse en las diferencias y ejercer en todo tiempo, empatía. “Nosotras no tenemos que ser nuestras propias enemigas, seamos como aquel primer movimiento de mujeres: constructoras de paz, cultura y civilización”, apuntaron.
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