Una reforma fiscal debe surgir del diálogo y la discusión pública. El sector público y el sector privado deben lograr acuerdos en beneficio del crecimiento y desarrollo de México: Coparmex
México requiere con urgencia modernizar y flexibilizar su marco fiscal, impulsar la inversión junto con el sector privado, mejorar la inclusión financiera e impulsar la participación de las mujeres en la economía, sobre todo, fomentando de forma global la formalidad, consideró la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).
Después de que Servicio de Administración Tributaria (SAT) anunciara que en septiembre se presentará una reforma fiscal, el organismo empresarial que encabeza José Medina Mora Icaza, aseguró que hay mucho qué hacer antes de pensar en más o mayores impuestos.
Dijo que las autoridades federales han advertido reiteradamente que, como lo propusieron en campaña, no se crearán ni aumentarán los impuestos en términos reales, por lo que la Coparmex cuestionó por qué entonces se hablaba de una reforma fiscal si la recaudación aumentó 8.8 por ciento en lo que va del año.
Asimismo, señaló que una reforma fiscal debe surgir del diálogo y la discusión pública. “El sector público y el sector privado deben lograr acuerdos en beneficio del crecimiento y desarrollo de México”, subrayó.
El sindicato empresarial reconoció que el gobierno federal, como los gobiernos estatales y municipales requieren recursos para cumplir con los servicios que les corresponde brindar a la población, por lo que para recaudar mayor dinero es necesario ampliar la base de contribuyentes, encontrar un mecanismo que sea sencillo y amigable para los microempresarios, con cálculos muy simples para que entren a la formalidad sin mayores costos. “No se requiere aumentar los impuestos, pero sí facilitar la declaración de las contribuciones”, aseveró.
El organismo empresarial dijo que en los negocios informales los trabajadores no cuentan con seguridad social; resulta importante que se incorporen a la formalidad. Con ello se mejora la calidad de vida y se amplía la base de contribuyentes. Hoy, el 56 por ciento de la población ocupada es informal.
Por otra parte, la Coparmex puso énfasis en la austeridad es muy positiva pero aclaró que cuando esta se ejecuta de forma imprecisa es un freno a la recuperación económica.
“La austeridad significa gastar e invertir en lo que se requiere y evitar gastos superfluos. Entendida así la austeridad es buena cuando se aplican ambas partes; en ello coincidimos con el gobierno. Pero cuando se ejecuta de forma imprecisa se puede convertir en un freno. Respaldamos la austeridad y consideramos que el país requiere que el gobierno ejerza el gasto público de forma correcta para promover la reactivación. Es momento de impulsar la inversión pública diversificada y productiva. Planteamos que la inversión pública que hoy es menor al tres por ciento como proporción del Producto Interno Bruto (PIB) crezca en los próximos años y se enfoque a proyectos de impacto económico y social”, aclaró.
Por otra parte, el organismo patronal refirió que si bien se incrementó el gasto en inversión pública 5.2 por ciento con respecto a 2020, preocupa que el enfoque siga siendo en proyectos no rentables del sector energético y en los proyectos emblemáticos de la administración actual. Mientras que se dio una reducción en diversos rubros del gasto, a Petróleos Mexicanos (Pemex) se le asignaron 544 mil millones de pesos, a pesar de que esta empresa estatal en 2020 perdió 480 mil millones de pesos.
En este sentido, la Coparmex aseguró que los tiempos exigen un replanteamiento de la estrategia energética actual, se requiere incentivar proyectos de infraestructura con participación pública y privada, priorizando proyectos de energías renovables. Además, debe repensarse a Pemex para dotarla de viabilidad.
Asimismo, el país requiere de una inversión pública diversificada en sectores como agua, transporte, salud, educación y seguridad. Son sectores que podrían convertirse en un vehículo para detonar inversión privada.
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