“Lo de ‘abrazos, no balazos’ no da resultados y nos hemos metido en el año más violento y con más crímenes de la historia moderna”, aseguró Jorge Espina Reyes, expresidente de Coparmex y panelista.
Dio inicio el congreso Instituciones públicas y educativas en pos del bien común, organizado por la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), el Instituto Pomotor del Bien Común (IPBC), creado por la comunidad UPAEP, y la Universidad Vasco de Quiroga (UVAQ) para trabajar por el bien común a través de la inbvestigación, divulgación y vertebración de la sociedad.
El congreso estuvo presidido por el doctor Emilio José Baños Ardavín, rector de la UPAEP; el maestro José Antonio Llergo Victoria, secretario general de UPAEP; Antonio Sánchez Díaz de Rivera, presidente del IPBC y director de comunicación, vinculación y relaciones institucionales de la UPAEP; el doctor Mariano Sánchez Cuevas, vicerrector académico; Eugenio Urrutia Albizúa, vicerrector de Posgrados e Investigación, todos ellos de la UPAEP; José de Jesús Catellanos López, director de la Fundación Editorial UVAQ y el doctor Matías Nevel, director del IPBC, UPAEP.
Rodeado por académicos y personal directivo, estudiantil y administrativo de la UPAEP; Jorge Espina Reyes, vicepresidente de la Junta de Gobierno UPAEP y presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de 2001 a 2003, impartió la conferencia “El contexto mexicano: Desafios ante la 4T”, en la que habló de los retos que enfrenta el actual gobierno, la importancia de la autonomía de las instituciones y la lucha que corresponde dar a todos los ciudadanos.
Defensa de la autonomía de instituciones
El expresidente de la Coparmex subrayó la importancia de que el gobierno respete la autonomía de instituciones, como la Suprema Corte de Justicia de la Nacion (SCJN) y el Banco de México (Banxico), el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) y el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), pues estas y otras más son instituciones que existen para ayudar al gobierno y hacer ver sus aciertos y desaciertos.
Respecto al recorte presupuestal y las limitaciones que ha sufrido el Inegi, órgano dedicado a medir la pobreza y la economía del país, Jorge Espina aseguró que entorpecer los resultados y el trabajo de esa institución conviene al actual gobierno, debido a que no se expone la situación real del país. Y calificó el trabajo del Inai como uno de los más importantes, que contribuye a eliminar la corrupción. “La mejor forma de acabar con la corrupción es que el gobierno público sea una caja de cristal, de modo que todos podamos ver lo que pasa ahí dentro”.
Espina Reyes alabó el trabajo de Coneval de exponer los resultados reales de los proyectos de AMLO y lo calificó como sumamente importante durante esta 4T; ya que los programas creados por López Obrador no tienen normas o medidas concretas que permitan darles seguimiento y ver los resultados reales; sólo se está repartiendo dinero entre 23 millones de mexicanos.
“El presidente actual no reconoce las victorias de la CNDH”, aseguró Espina Reyes, y comentó que López Obrador cuestiona por qué la Comisión no hizo observaciones a otros presidentes, pese a que, en los hechos, es una institución que nunca se ha quedado callada.
Además, reconoció al Sistema Nacional Anticorrupción, pues a pesar de ser de los más atacados se ha mantenido con la ayuda de organizaciones civiles y ha impulsado iniciativas importantes como la declaración “3 de 3”, que exige la rendición de cuentas a personas y partidos políticos.
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Grandes y graves problemas que trajo la 4T
“¿Qué sucedió para que México se encontrara con la llamada cuarta transformación?”, cuestionó Espina. Y en seguida enumeró tres grandes y graves causas: uno, corrupción e impunidad; dos, pobreza y desigualdad, y tres, inseguridad y violencia. “La corrupción ha golpeado al país durante décadas y no se ha podido extirpar”, afirmó y remarcó que, especialmente durante el sexenio pasado, la corrupción llegó a niveles insospechados y, empezando por el expresidente Peña Nieto, hubo cinismo en todo el gobierno y el hartazgo social llego a niveles nunca vistos, debido a que la impundiad era total.
“La pobreza y la desigualdad son consecuencias netas de la corrupción; impactan y afectan a las clases más necesitadas”, indicó en su ponencia el expresidente de la Coparmex, y expusó que el robo de dinero de programas para los más vulnerables y las políticas públicas deficientes empeoraron la situación de México, llevando a miles de personas a asegurar que sus impuestos iban a ir a los bolsillos de quienes conformaban un gobierno corrupto.
Por último, especificó que la inseguridad y la violencia se han diversificado, pues además de los peligros que causa el narcotráfico, surgieron mecanismos como el cobro de derecho de piso; subrayó que desde hace tiempo hay un estado débil, un estado incapaz de enfrentarse a la delincuencia, un estado encabezado por AMLO sin estrategias y que permitió que 2019 fuera el año más violento de la historia moderna de México.
El también vicepresidente del la Junta de Gobierno de la UPAEP explicó que los mexicanos deben pensar en el bien común, pues si el gobierno liderado por Andrés Manuel López Obrador logra eliminar los tres problemas que enumeró, como lo prometió durante años, la cuarta transformación tendrá razón de ser.
Finalmente, Jorge Espina indicó que como ciudadanos debemos defender la autonomía de las organizaciones, exigir que se persiga a los corruptos y se acabe con todos ellos, no de manera selectiva; que los programas sociales tengan reglas de operación para evitar desvíos de dinero y falta de resultados, y que se aplique una estrategia frontal contra el crimen organizado. “En la situación actual de México, a nadie se le permite permanecer pasivo, todos debemos ponernos a trabajar”, comentó.
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