La perspectiva de crecimiento para México ha pasado de 2.5 a 2.0 por ciento, según la OCDE, mientras que AMLO ha declarado que la economía del país “va muy bien”.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha reducido sus perspectivas de crecimiento para México para el 2019 y 2020, rebajando el porcentaje de 2.8 a 2.3. En contraste Andrés Manuel López Obrador declaró durante su mañanera de este miércoles que la economía del país “va muy bien”.
La OCDE informó que, de acuerdo con el documento preliminar de Perspectivas Económicas, las fuertes remesas, el aumento del salario mínimo y los planes del gobierno para impulsar la inversión en infraestructura y reactivar la producción de energía deberían elevar la demanda interna en el país.
Sin embargo, la organización subrayó que los problemas como la alta incertidumbre política, tensiones comerciales actuales, desconfianza empresarial y del consumidor han provocado una desaceleración en el crecimiento del comercio mundial y cambios drásticos en las mediciones de los nuevos pedidos de diferentes países.
Por ello, la OCDE ha invitado al país a participar en el diálogo multilateral para evitar nuevas restricciones comerciales perjudiciales y aprovechar las oportunidades para una mayor liberalización que podría beneficiar a todas las economías.
Y especificó que los bajos precios del petróleo y mejores condiciones financieras pueden ofrecer un margen para reducir la tasa de interés en las economías de mercados emergentes. Así como también el tener un marco de políticas bien estructurado y una inflación vinculada al objetivo buscado, pero para lograr esto se debe tener una mayor ambición de reforma estructural que busque mejorar las oportunidades para todos.
Por otro lado, el presidente habló del tema económico en el país durante su conferencia mañanera en la que declaró que México en estos términos “va muy bien”.
Ante los informes de la OCDE, Andrés Manuel comentó “México se va a convertir en una potencia económica porque tiene todo, tiene muchos recursos naturales, un pueblo trabajador y algo que le hacía falta, que impedía que México creciera y progresara, le faltaba un buen gobierno y ahora hay buen gobierno, aunque esto no les guste a nuestros adversarios”.
Antes de evadir el tema, nuestro presidente aseguró que la crisis del país es provocada por la corrupción y se mostró confiado de que “si ya no hay corrupción tolerada se va a lograr el renacimiento del país”.
Con información de Milenio
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