En el panorama laboral actual existe una tendencia creciente entre los profesionales de generaciones más jóvenes que prefieren no asumir roles de liderazgo o directivos, ello obedece a que algunos consideran que estos puestos pueden implicar desafíos significativos, incluyendo una mayor carga de trabajo, estrés y presión, aspectos que podrían contrarrestar las ventajas de dichos cargos, señala el Termómetro Laboral de OCC.
De acuerdo al sondeo que se aplicó a dos mil 761 trabajadores en México (del 12 al 19 de julio) para conocer cuál consideran que es la principal razón por la que algunos profesionistas jóvenes no aspiran a puestos de liderazgo, el 51 por ciento comentó que las nuevas generaciones han comenzado a enfocarse en su vida personal, además de la laboral, encontrando así un equilibrio que muy pocos están dispuestos a perder. Además, este grupo señaló que muchos jóvenes crecieron viendo a sus padres trabajando largas horas, lo que ha influido en su deseo de no repetir ese modelo y buscar una vida que no dependa del trabajo.
Por otra parte, el 33 por ciento dijo que las nuevas generaciones quieren evitar el estrés y la presión que conlleva dirigir a todo un equipo de trabajo. De acuerdo con la opinión de los participantes, los jóvenes buscan hacer del empleo un adicional en su forma de vida, no un propósito. También se mencionó que en posiciones de liderazgo, la falta de tolerancia y flexibilidad puede llevar al agotamiento, algo que los jóvenes no desean experimentar.En tanto, el nueve por ciento comentó que el miedo a cometer errores dirigiendo a otras personas o tener un cargo de responsabilidad en una empresa podría influir en que las nuevas generaciones eviten tener un mal desempeño como líderes y prefieran mantener un mejor papel como colaboradores.Por otro lado, el siete por ciento señaló que el poco interés de los jóvenes por liderar en una organización se debe a que en su vida profesional priorizan aspectos como el ambiente y cultura de la empresa, flexibilidad laboral o ser líderes de su propio proyecto como emprendedores.¿Cuál será el imán?Sobre las acciones o estrategias que pueden implementar las empresas para inspirar a que las nuevas generaciones de profesionales quieran adquirir puestos directivos o de liderazgo, el 32 por ciento considera que ofrecer mayor flexibilidad laboral permitiría romper con la creencia de que crecer en el aspecto profesional significa perder el equilibrio con la vida personal. Además, una cultura laboral sana, donde haya congruencia entre lo que se pide y lo que se hace, puede ser fundamental para atraer a jóvenes líderes.El 27 por ciento considera que la solución para tener jóvenes líderes no es promoverlos de un momento a otro, sino que debe haber un proceso en el que pueda despertar ese interés por tomar un papel más estratégico dentro de la organización y no resientan las nuevas responsabilidades como una carga. Esto incluye definir claramente los objetivos y proporcionar un plan de proyección claro con pasos definidos para crecer en la empresa.
Para el 21 por ciento mejorar la remuneración económica sería el principal atractivo para que más jóvenes aspiren a tomar puestos de mayor responsabilidad, ya que, según su percepción, muchas veces los salarios no son proporcionales a las responsabilidades y conocimientos que exigen estos roles.Por último, el 20 por ciento percibe que la falta de oportunidades de crecimiento es uno de los detonantes de este fenómeno. Los jóvenes no están interesados en quedarse muchos años en una empresa esperando a que les ofrezcan un ascenso; por el contrario, si esta ventaja no llega durante el tiempo que han definido para crecer en su lugar de trabajo, lo buscarán en otra empresa.
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