El mercado laboral en el mundo se ha transformado en los últimos años, y una vez recuperados e inclusive superados los niveles de empleo previos a la pandemia por COVID-19 existe una insuficiencia de mano de obra para llevar a cabo las actividades económicas, fenómeno que se ha convertido en uno de los retos principales para el 75 por ciento de las empresas afiliadas a Coparmex.
Así lo revela el estudio El panorama de las vacantes y la población disponible en México, elaborado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) y la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en el que advierte que hay más de 10 millones de personas que, a pesar de estar en edad de trabajar y tener potencial para hacerlo, no se encuentran ocupadas y no aportan su talento a la economía.
En conferencia de prensa conjunta encabezada por Valeria Moy, directora general del IMCO, y José Medina Mora Icaza, presidente nacional de Coparmex, destacaron que la escasez laboral que enfrentan algunas empresas en el país, no necesariamente refleja una insuficiencia de personas en edad de trabajar, sino a otras condiciones.
Detallaron que de los más de 10 millones de personas que pueden trabajar, pero no se encuentran ocupadas, dos millones están desocupadas, 2.6 millones no participan en la economía por encontrarse en un contexto que se los impide, y 5.8 millones de personas disponibles para laboran por falta de incentivos.
Ana Gutiérrez, coordinadora de comercio exterior y mercado laboral del IMCO, enfatizó que la población no aprovechada en el mercado laboral lo componen principalmente mujeres y jóvenes quienes están desmotivados para buscar empleo, o bien, su contexto les impide incorporarse a trabajar, pese a que desean hacerlo.
En tanto del lado patronal, José Medina Mora destacó que de acuerdo a una encuesta realizada en el primer cuatrimestre de 2023 entre socios de Coparmex, mostró que existen cinco principales razones que enfrentan los negocios para encontrar personal: 1) Dificultad para cubrir vacantes, 2) Negociaciones salariales, 3) Escasez de trabajadores calificados, 4) Rotación de personal y 5) Falta de recursos para ampliar el personal.
En total, 75 por ciento de las empresas que participaron en el sondeo consideraron que su reto principal en materia laboral radica en la insuficiencia de personal, destacó Medina Mora Icaza.
Entre los principales hallazgos del estudio destaca que la población joven representa un potencial para incorporarse al mercado laboral, ya que prevalecen dentro de la población que actualmente no se aprovecha en la economía.
Asimismo, señala que dentro de la Población Desocupada, quienes renunciaron a su empleo anterior señalaron dentro de sus razones el deseo de recibir una remuneración mayor, así como un deterioro en las condiciones de trabajo.
La mayor parte de la población que no participa en el mercado laboral está compuesta de mujeres que destinan su tiempo a quehaceres domésticos y consideran que las posibilidades de encontrar un empleo son bajas.
Más del 80 por ciento de las personas con interés en trabajar, pero que están en un contexto que les impide participar en la economía, son mujeres con hijos.
Además, 30 por ciento de la Población No Económicamente Activa Disponible tiene, como mínimo, estudios de preparatoria terminados. El nivel educativo de esta población puede ser un factor para explicar la percepción de bajas posibilidades de encontrar empleo.
De esta manera, el análisis deja en claro que factores como el nivel de salarios, el rezago educativo, la flexibilidad o el acceso a apoyos para el cuidado infantil son fundamentales para entender la situación actual del mercado laboral.
Mujeres y jóvenes primero
Valeria Moy recalcó que los datos laborales muestran que gran parte de la población con potencial de integrarse a la economía y contribuir a resolver la falta de cobertura de vacantes disponibles enfrentado por las empresas, son mujeres.
En este sentido, dijo que es necesario reconocer y partir de esa realidad para tomar acciones encaminadas a reducir las barreras que enfrentan e incentivar su participación en el mercado laboral.
Al respecto, José Medina Mora reconoció que las empresas deben dar flexibilidad a las mujeres y tener la infraestructura para los cuidados que permita que se puedan incorporar a la vida laboral.
En cuanto a conocer qué está pasando con el desempleo de la población juvenil, el dirigente del sindicato patronal consideró que es necesario profundizar en el tema y cuestionar por qué hay una gran cantidad de jóvenes disponibles para trabajar, pero que no quieren trabajar.
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