La desaceleración del crecimiento global, las mayores medidas proteccionistas, los riesgos geopolíticos y la volatilidad en los mercados financieros internacionales son factores que podrían afectar la economía de México.
Pese al entorno de incertidumbre económica que ha prevalecido en el país durante el segundo semestre de 2019, los niveles de morosidad de hogares y empresas han sido relativamente moderados y estables; sin embargo, esta situación podría revertirse en caso de mantenerse la debilidad del crecimiento o en caso de contraerse el empleo, lo que afectaría al ingreso de los hogares, particularmente de los de menores ingresos, indica el Reporte de Estabilidad Financiera de diciembre del Banco de México.
El reporte del banco central advierte que México podría verse afectado en sus finanzas de continuar el entorno complejo a nivel mundial, principalmente por cuatro factores: una importante desaceleración del crecimiento global; la adopción de mayores medidas proteccionistas a nivel mundial y crecientes riesgos geopolíticos; la volatilidad en los mercados financieros internacionales con recomposición de flujos hacia activos de menor riesgo, así como una menor inversión y menor crecimiento en la economía nacional.
De junio a la presentación de este reporte, se observó que en los hogares incrementaron su ahorro en relación con su endeudamiento. En tanto, que en este lapso las empresas evitaron solicitar créditos y optaron por emisión de deuda en el exterior, aprovechando la reducción de tasas internacionales.
A pesar de que en los últimos cinco meses ha prevalecido un entorno de marcada incertidumbre asociado tanto a factores externos como internos, el sistema financiero mexicano ha mantenido una expansión moderada, sin una toma de riesgos excesiva. Así, tanto el sistema bancario en lo individual, como el sistema financiero en su conjunto, han mantenido solvencia y liquidez adecuadas, con niveles de riesgo acotados, destaca el informe.
Por otra parte, el banco central puso especial atención a los riesgos cibernéticos e informáticos a los que actualmente se enfrenta el sistema financiero los cuales se han incrementado por el mayor uso de tecnologías de la información en las operaciones bancarias.
Banxico destacó que es importante preservar un sistema financiero estable, eficiente e innovador, que pueda enfrentar un entorno complejo como el que actualmente enfrenta nuestro país, sin que ello implique un aumento excesivo en los riesgos que asumen los intermediarios financieros, y sin comprometer el funcionamiento adecuado del sistema financiero.
Insistió en que el sistema financiero mexicano atraviesa por un ambiente de incertidumbre asociado a factores externos como internos, lo que propicia que las instituciones que lo conforman dirijan de manera segura y eficiente el ahorro del público hacia proyectos rentables.
Para ello, es necesario que en el país exista un marco institucional sólido, un capital humano adecuado y una regulación y supervisión financieras que salvaguarden la integridad del sistema y protejan los intereses del público. “De esta forma, el sistema financiero contribuiría a elevar, de manera sostenida, tanto el crecimiento económico como el bienestar de la población”.
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