Entre el oficialismo pareciera que existe una divisa común: Te dejo hacer lo que quieras… pero, si te atrapan o te “cachan”, no desconozco. El argumento no es el mismo ni val lo mismo para todos, porque una cosa es Rubén Rocha o el Mayo Zambada y otra muy distinta es Fernández Noroña o el Cuau.
EVIDENCIAS Y CUROSIDADES
En tanto que Rubén Rocha fue rodeado con incienso, aplausos, cariñitos y frases cachondas para protegerlo de las voces malévolas que lo relacionan como cercanísimo fratello de la delincuencia organizada y el narcotráfico; o Ignacio Ovalle, el impresentable Garduño de migración y los chicos del Klan son cubiertos con el manto sagrado de palacio, a otros –dicen los rancheros- les va como en feria.
Sin duda, la nota-escándalo de los recientes días, fue la defenestración de uno de los principales impulsores de la Reforma al Poder Judicial. Juan Pablo Penilla, abogado de El Mayo, destacado militante, aunque digan lo contrario, de Morena y hombre de las confianzas de muchos en la cúpula guinda, sufrió un terrible revés que lo condena de por vida, a ausentarse de las lides políticas del movimiento al que le juró lealtad eterna.
JUGADAS DEL ENTORNO
Como todo lo que tiene que ver con el movimiento propiedad de López Obrador, adquiere un profundo aroma a fentanilo, cocaína y marihuana, además de otros productos con características similares. Por ello, ahora, toda la información de Morena tiene un encuentro cercano de primer tipo con El Mayo Zambada.
Las distintas notas en los diarios de circulación nacional son interesantes a más no poder, porque después de la captura de El Mayo, a varias estructuras guindas y cercanas al Zócalo de la capital, le retembló en su centro la tierra. Más aun, a segundos después de darse a conocer la carta del capo dirigida al gobierno de México, es decir, de la doctora en coordinación con López Obrador, porque en la carta exigiendo su repatriación por haberse violado en su detención, el debido proceso, privarlo de la libertad y engañarlo para llevarlo a Estados Unidos en las narices de Gertz Manero.
Lo anterior resultaría de uso común y lugares igualmente comunes, de no ser porque el capo nombra a Juan Pablo Penilla Rodríguez como su abogado patrono. Cuando el hecho se difunde en medios, se destapó lo que ya era un secreto a voces: la cercanísima relación de Penilla con Morena. Para “amolarla de acabar”, se dio a conocer que en el 2023, el señor fue asesor de Américo Villarreal en Tamaulipas, además recibir mucho incienso y palmas de la Cámara de Diputados. Al año siguiente, Penilla recibió un reconocimiento de gran calibre en el Senado de la República dominado por las huestes de Adán Augusto.
Sin duda y en un plano de lealtad institucional e ideológica, se propició el impulso a la Reforma al Poder Judicial.
LA OTRA PARTE DE LA HISTORIA
No podía ser de otra manera, cuando se destapa la relación de Penilla con El Mayo Zambada, todo mundo lo dejó solo. Por una parte, la dirigencia nacional de morena, dijo que (…)“Tras una revisión exhaustiva en nuestras bases de datos, y contrario a lo dicho por la oposición, NO EXISTE NINGÚN REGISTRO de que Juan Pablo Penilla Rodríguez haya formado parte de la asesoría legal de la campaña de nuestro Partido-Movimiento (…) Es decir… ni conocen al joven.
Y lo peor para la causa de Penilla, fueron las aseveraciones y el deslinde de su otrora amigo Américo Villarreal, al afirmar (…)El Gobierno de Tamaulipas informa que el Licenciado Juan Pablo Penilla Rodríguez no es servidor público, ni asesor honorífico del Ejecutivo Estatal (…) En buen romance, “esquinazo auténtico”
El escribano insiste. En el oficialismo de hoy hay unos que son más iguales que otros iguales. ¿O no?
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