El pasado 12 de octubre se celebró la Fiesta de la Hispanidad también conocida como “Día de la Raza”, motivo por el cual se impone hacer una reflexión acerca de lo que significó el Encuentro de Dos Mundos.
Empezaremos diciendo que, gracias a que América se interpuso en el camino de Colón hacia la Indias, fue posible que en unas cuantas décadas los pueblos del Continente americano pasasen del Neolítico al Renacimiento.
Gracias a la presencia de España en América, fue posible que pueblos que antes eran distintos y distantes se unificasen en lo racial, en lo lingüístico y en lo administrativo.
En lo racial porque –fruto de la mezcla de las sangres indígena y española- surgió la raza mestiza.
En lo lingüístico porque fue posible que, desde la Alta California hasta la Tierra del Fuego, todos se entendiesen en el idioma castellano.
En lo administrativo porque etnias diferentes y hostiles entre sí pasaron a formar parte de los virreinatos que dieron origen al Imperio español.
Como ya en otra ocasión lo hemos dicho, quien ha comprendido a la perfección el tema hispánico y se ha encargado de difundirlo es el cineasta español José Luis López Linares.
Primero con su película, luego convertida en libro “España la primera globalización”
Y luego con otra película “Hispanoamérica. Canto de amor y esperanza”
El documental más reciente de José Luis López Linares (“Hispanoamérica. Canto de amor y esperanza”) se estrenó con gran éxito en España el pasado 12 de abril y dentro de pocos días habrá de estrenarse en varios países del Mundo Hispánico.
Al parecer dicho documental se estrenará en México el jueves 17 de octubre.
Un documental que llega a México en un momento muy oportuno, especialmente si tomamos en cuenta la controversia que se ha producido con motivo de si el Rey Felipe VI de España debe o no disculparse.
Un documental muy completo nunca antes visto y que conviene ver porque solamente así lograrán disiparse dudas que son causadas por el resentimiento y la ignorancia de ciertos sujetos de los cuales más vale que olvidemos sus nombres.
José Luis López Linares con sus documentales así como Nacho Cano con su musical “Malinche” están haciendo una gran labor en pro de la verdad histórica.
En una época en la cual la mayoría de la gente prefiere el cine, el teatro o cualquier otro espectáculo antes que la lectura, la obra de estos dos personajes resulta ejemplar.
Y decimos que resulta ejemplar porque, ante la pereza que el común de la gente siente por la lectura, el presentar temas relevantes por medio de imágenes facilita que se formen rectos criterios.
Ante la catarata de calumnias que se ha derramado contra España y la Iglesia, no basta con que el común de la gente lea obras clásicas como “Defensa de la Hispanidad” de Ramiro de Maeztu o “La Leyenda Negra” de Julián Juderías.
Es necesario ir más allá y salir en búsqueda del gran público ofreciéndole imágenes que le ayuden a captar mejor las ideas.
Esa es la gran labor que durante los últimos años han venido realizando Nacho Cano y José Luis López Linares.
Como al principio dijimos, en estos días de la segunda quincena de octubre de 2024 está por estrenarse en México el documental de López Linares.
Conviene estar muy atentos para no perderse una gran producción que pudiera ser saboteada por elementos anticatólicos y antihispanistas.
Conviene estar muy atentos para no perderse una gran producción que ha tenido éxito en otros países y que habrá de ayudarnos a rechazar el error y aceptar la verdad.
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