Sólo el desconocimiento de opciones, rutas y precios alternativos impide comerciar más allá de tus límites tradicionales.
Hubo un tiempo en el mundo de los negocios en el que describir a una empresa como multinacional era darle el sinónimo de grande. El costo de operar fuera de su jurisdicción original era tan alto que resultaba una excluyente automática para las más de las pequeñas empresas de cualquier país.
Y mientras muchos siguen viendo lo multinacional como un efecto exclusivo del tamaño, hoy una micro-multinacional de un país latinoamericano –sin oficina corporativa alguna, pero con un sitio web y computadoras funcionales– vendió un servicio a una empresa americana que será entregado presencialmente por un nacional europeo.
En su definición más simple, una multinacional es una empresa que tiene negocios recurrentes en varios países. Con o sin filiales formales, origina ganancias en más de una jurisdicción y –en cierto momento– las concentra en su país de origen.
¿Qué explica el boom de las micro-multinacionales en el mundo? Aquí tres factores para la reflexión:
1) Son los sistemas de pago en línea los catalizadores de la micro-globalidad.- La pura presencia en web no explica el boom del micro-comercio transfronterizo. Mover dinero entre países en el sistema financiero tradicional es tan complejo y caro que la facilidad del pago en digital hace toda la diferencia para los pequeños negocios.
Sin demérito de las modestas eficiencias ganadas en el mundo de las tarjetas de crédito y débito tradicionales, es la confianza que han ganado los sistemas de pago en línea como PayPal, Stripe, MexPago y más lo que explica la multiplicación de las carteras digitales, los links de pago y los minisitios especializados de las micro-multinacionales.
2) La comunicación digital accede al nicho, mientras multiplica el alcance.- Ya está bastante digerido en el mundo de los negocios que estar en web es tan insuficiente como sólo tener redes sociales sin ninguna política de comunicación que abone inteligentemente a tu proceso comercial.
Cuando un pequeño empresario domina el lenguaje de uno o varios nichos y construye varias audiencias, no tarda nada en palpar que comunicar y mercadear en digital es hablar más allá de su código postal. El alcance, sólo limitado por el idioma, es instantáneamente multinacional.
3) La micro-logística ofrece más alcance que las posibilidades de muchos negocios.- Sólo el desconocimiento de opciones, rutas y precios alternativos impide comerciar más allá de tus límites tradicionales. Mover bienes y entregar servicios en lugares insospechados es una constante para las micro-multinacionales.
Sí. Hay que aprender a diseñar tiempos y formas óptimas para entregar lo que se vende, medir riesgos, cumplir ciertas reglas fiscales y administrar las expectativas diferenciadas de los clientes. Nada que no se pueda sortear en un mundo cada vez más diseñado para resolver asuntos a distancia.
No obstante, existen retos para las micro-multinacionales no subestimables. El primero: la mentalidad. Entender que no todo se hace igual en otras latitudes, ni todos entienden el mismo lenguaje. Lograr el equilibrio entre lo que debe verse o leerse igual y lo que debe de percibirse personalizado, no es tarea de una sola persona, ni de un solo ciclo de trabajo.
La globalización no sólo ha construido capacidad de consumo global, ha detonado empresarialidad local con acceso global. Y entre más microempresas se apuntalen en lo digital como un elemento intrínseco de su modelo de negocios, más serán las micro-multinacionales que maduren en diferentes mercados.
Cada quien póngale la escala a la palabra micro. Cada dueño decida qué tanto quiere multiplicar su presencia multinacional. Lo que nadie debe negar es que el mundo de lo digital acelera en serio a las micro-multinacionales.
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