Ante la no opción de reuniones presenciales, las videoconferencias resultaron la alternativa idónea para reunirse en todo tipo de asuntos.
Los números indican que la adopción de videoconferencias sigue imparable en todos los frentes.
Solo en su primer trimestre fiscal 2022, que va de febrero a abril de 2021, Zoom Video Communications facturó 946 millones de dólares, 628 millones más que en el mismo trimestre de su año fiscal 2021 y superando los 882 millones que facturó en su trimestre fiscal anterior.
Ante la no opción de reuniones presenciales, las videoconferencias resultaron la alternativa idónea para reunirse en todo tipo de asuntos. Pero ya con la posibilidad de sí tener algunas reuniones en presencial, para muchos un Zoom (dicho en genérico) se mantiene como la opción.
¿Qué debemos contemplar empresas y ejecutivos para evitar lo que el laboratorio de interacción humana de la Universidad de Stanford ha denominado como ‘Zoom fatigue’? Aquí tres reflexiones para la gestión directiva:
1) Rompamos el ciclo Zoom ‘por default’.- No hay duda. La herramienta tiene valor, pero la comunicación y la interacción se enriquecen cuando transitan en distintos canales, espacios y contextos.
Si un asunto no requiere ver documentos y es de un grupo reducido, por ejemplo, una tradicional conferencia telefónica puede resultar óptima. Citar a un par de colaboradores a una caminata matutina para rebotar ideas, aún mejor. Y ni se diga alternar con reuniones presenciales que ofrecen lectura plena del lenguaje no verbal.
2) Dejemos intervalos intencionados para trabajar.- Salir de un Zoom para ingresar a otro puede resultar positivo desde la perspectiva de la omnipresencialidad, pero ¿a qué hora procesamos los temas acordados en cada junta? ¿A qué hora pensamos?
Una sana dinámica de trabajo requiere tiempo para responder –con concentración – otros frentes de la dinámica de los negocios y, para ello, hay que gestionar intervalos explícitos y no mal acostumbrarse a ‘estar’ en un Zoom con el cerebro en otro espacio.
3) Aprendamos a salir de cada Zoom anticipadamente.- Si ya no tienes razón para permanecer en la junta o simplemente percibes que ya terminaste de agregar valor en ese espacio, consulta la posibilidad de una salida anticipada.
Al margen del cargo, muchos están en un Zoom solo por si son requeridos o por el temor a perderse algo. Es crítico procurar estar al 100 por ciento en la sustancia y a salirte prudente y respetuosamente cuando ya solo estás ‘calentando la pantalla’.
Las videojuntas, videollamadas y los videoeventos no se irán a ningún lado en ningún plano de la vida. Su uso se abarata, la opción se disemina hasta cada rincón del mundo de los negocios y las prácticas para un buen aprovechamiento se deben pulir con reglas organizacionales gestionadas con un enfoque de productividad y balance.
Así que la próxima vez que te veas convocando a un Zoom, quizá convenga hacer una pausa para evaluar si no existe algún método o tecnología alternativos que hagan más eficiente y atractivo el objetivo pretendido.
Y es que ya nos conviene asimilar que la fatiga de Zoom no se origina por un uso intensivo e inteligente, sino por su abuso improductivo e irreflexivo.
Y la Convención de la AIMMGM será en Mundo Imperial
Los mineros regresan a Acapulco del 19 al 22 de octubre. Exigiendo prueba de antígenos negativa para ingresar al evento, la Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgistas y Geólogos de México, A.C. realizará su siempre nutrida exhibición internacional.
Su programa de conferencias incluye un prometedor panel titulado ‘Diálogo: La Minería y su Impacto en los Medios de Comunicación’ en el que participarán Yuriria Sierra de Grupo Imagen, Enrique Quintana de El Financiero, Carolina Rocha de TV Azteca y Genaro Lozano de Televisa. Será un gusto moderar la conversación. ¡Ahí nos vemos!
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