El divorcio es una experiencia devastadora, algunos lo consideran un fracaso, otros una liberación y para otros más es un acto de honestidad y valor. Lo que es una realidad, es que cuando unos padres se divorcian, pierden todos.
Sea como sea, el divorcio es una opción que se elige, una decisión que se toma porque se considera la mejor o porque hasta ahí llegó la relación.
Ahora bien, hay de divorcios a divorcios. Una vez tomada la decisión, es muy importante la forma en que los padres la llevan a cabo, buscando ante todo el bienestar de sus hijos, actuando de una forma madura.
Comparto contigo algunos consejos de qué hacer y qué no hacer, recomendados por la autora y amiga Martha Alicia Chávez.
Por el bien de tus hijos:
– No los uses como mensajeros.
– No los pongas en una paradoja, hablándoles mal de su papá o mamá o pidiéndoles que elijan a uno de ellos.
– No formes alianzas con uno de ellos, buscando alejarlo ya sea física o sentimentalmente.
– No los conviertas en tus amigos y confidentes, no tienen por qué saber todo lo que te ocurre.
– No los conviertas en aves de mal agüero, pidiéndoles que sean ellos los que le den la noticia de que quieres divorciarte.
– Por favor, no los hagas testificar contra su padre/madre, ellos sentirán que están traicionando a uno de sus progenitores.
Y que sí debes hacer por el bien de tus hijos:
– Haz que el divorcio no sea igual a abandono, no tienen por qué sentirse huérfanos física, sentimental y económicamente después de un divorcio.
– Cúmpleles todo lo que digas o prometas, ya que les provocas una gran decepción al no hacerlo.
– Ten cuidado con la culpa/compensación manteniendo en tu hogar una disciplina y reglas claras. No compenses con cosas materiales para hacer a un lado el sentimiento de culpa.
– Sé impecable con tus palabras, si vas a decir algo sobre tu excónyuge o su familia que sea algo positivo, sino mejor guarda silencio.
– Tomen una decisión madura de con quien deben vivir tus hijos. Cada situación es única, si son pequeños ellos no pueden decidir, si son adolescentes se puede hacer en conjunto.
– ¡Sé feliz!, cuida el equilibrio en los diferentes aspectos de tu vida.
La separación o el divorcio es una etapa difícil. El duelo es real y duro, pero como todos los duelos, es posible superarlo y recuperar la esperanza y alegría de vivir, tanto tuya como de tus hijos.
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* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com
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