El rechazo a la reforma constitucional para militarizar a la Guardia Nacional nomás será una cuestión política, porque en el fondo es que no hay voluntad de combatir al crimen organizado.
El ñor y la ñora se escaparon unos diítas a festejar su aniversario de casados, por aquello de la seguridad no va a divulgar a dónde fue. O sea que anda medio desconectada de las noticias, lo cual no le ha impedido enterarse de que ¡resucitó César Yáñez!
Yáñez fue el hombre que causó el primer escándalo de derroche entre los morenos porque le dio por hacer bodísima en Puebla antes de que empezara formalmente el sexenio. Por eso, lo mandaron a la congeladora de Palacio o por lo menos lo tenían en lo oscurito; aunque luego en este país en lo oscurito ocurre lo más interesante, así que quién sabe si sea buen noticia para Yáñez ahora tener un cargo con reflectores en una subsecretaría. Dicen algunos que el asunto es tejemaneje directo del primer hombre, o sea, de Adán el de Gobernación, aunque claro con la venía del no-me-preocupan-que-los-niños-se-mueran-por-falta-de-medicinas-pero-no-anden-hablando-de-mi-hijo. Ahora, lo más interesante es que su largo título como subsecretario incluye los asuntos religiosos y eso justo cuando a raíz de asesinato de los jesuitas en Chihuahua se destaparon más asuntos hasta que se cobra derecho de piso a iglesias y parroquias de todo el país. Así que seguramente por ahí debe ir la intención de nombrarlo justo a él.
Aunque esta ñora trata de relajarse, pues ayer mientras el ñor se iba al gimnasio, esta ñora acabó en franca plática con una ñora chilena que anda de visita por acá con sus escuincles, perdón, con sus bendiciones. Pues según le dijo por estas fechas en Chile tienen las escuelas las vacaciones de invierno. A la ñora chilena le llamó mucho la atención que ahora evitemos usar las carreteras de noche por aquello de la inseguridad. La verdad es que hay historias de que hasta de día pasan cosas horribles.
A esta ñora le dio mucha pena aceptar que así es, que estamos perdiendo día a día más territorio a manos de los delincuentes. En la conversación también salió que el combate al crimen se ha militarizado y a la chilena de primer momento le parecía buena idea porque los narcos son muy poderosos. A esta ñora le sorprendió porque suponía que los chilenos luego de Pinochet les decías militar y decían “cruz que se vaya el diablo y venga Jesús” o cualquier otra frase equivalente que usen en el sur.
Esta ñora se quedó medio turulata un rato pensando en el asunto, la margarita a su lado no tenía nada que ver. Es que el asunto es muy intrincado, y esta ñora recordó que cuando este relajo de meter al ejército empezó hace muchos años cuando el inolvidable Calderón se junta con Lázaro Cárdenas (quien por cierto anda también tras bambalinas palaciegas y seguro tuvo muchas pláticas con el César) porque Michoacán estaba cayendo en manos del crimen. Al principio, se dijo que era temporal y, de hecho, regresar a los soldados a sus cuarteles fue una propuesta que convenció a muchos hace 4 años.
Y si en algo dio un giro de 180 grados el cada-día-demuestro-más-intolerancia-y-ya-llegué-a-llamar-hitleriano-a-un-judío-nomás-porque-es-opositor fue justamente ese renglón y ahora le apuesta justo a militarizar todo incluso la Guardia Nacional.
Esta ñora cree oportuno recordar que los militares al final del día están hechos para eliminar al contrincante; no están formados en sí para combatir a los criminales sino a los invasores extranjeros. En cambio, en teoría la policía idealmente sí se forma para combatir a los mexicanos que actúan en contra de la sociedad. Con policía, hay que incluir tanto a un cuerpo operado desde el gobierno federal (se llame Guardia Nacional, Policía Federal o Policía del Bienestar, si quieren) y por supuesto, las policías estatales y municipales.
Porque más allá del asunto del fracaso de los “abrazos y no balazos” o “los delincuentes también son seres humanos”, que son apapachos y regalos para la delincuencia, está el enorme hueco que no apoyar a las policías estatales y municipales. La verdad es que el combate a la inseguridad (que no todo es narco en sí) en alguno que otro estado como Querétaro sí se hace de forma más efectiva; pero en otros casos, especialmente en el de los gobernadores de Morena, pues sienten que sería una traición trabajar más que su jefe y su jefe nomás trabaja como tres horas al día (y dos son diciendo cosas a la ligera y con poco tino). Así que los huecos al combate a la delincuencia cada día son mayores y casi no nos estamos fijando en lo local.
Esta ñora cree que se debe pensar, hablar y discutir este tema muy a fondo para pensar cómo vamos a arreglar el asunto con propuestas serias que la oposición debe proponer. En los dos años y medio quedan las cosas sólo va a empeorar. Ya sea porque en verdad hay un pacto con la delincuencia y este es un narcogobierno se va a dejar que los grupos delincuenciales se hagan del control del 30% de territorio; porque es tal la incapacidad operativa que ni siquiera tienen idea de cómo combatir incluso. Esta ñora honestamente ni siquiera cree que el nomás-me-importan-los-aplausos-de-mis-solovinos-y-el-beisbol haya sido capaz de negociar un pacto con los narcos porque si fuera así se notaría “paz” en más estados; esta ñora más bien cree que nomás entregó la plaza como don Jaimito el del Chavo del Ocho, “para evitar la fatiga” y si de paso eso le ayuda a ganar elecciones, pues mejor.
Por supuesto, a esta ñora no se le olvida que está pendiente el envío de la reforma constitucional para militarizar ahora sí legalmente a la Guardia Nacional y es altamente probable (¡esta ñora espera que así sea!) por la moratoria constitucional que no pasará. El rechazo a esa iniciativa, al final, nomás será una cuestión política, porque el fondo es que no hay voluntad de combatir al crimen organizado y se favorece que crezca el vacío de poder en los municipios y estados.
En fin, esta ñora va a buscar al ñor que es más optimista y siempre la pone de buenas (por algo se casó con él), porque para estar de festejo estas líneas le salieron muy tristes.
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