Antes de iniciar formalmente este acto de rendición de cuentas, esta ñora quiere dejar claro que ella fomenta el diálogo en todo momento.
Esta ñora ha decidido que dará al ñor y a los escuincles, perdón, bendiciones, un informe de sus labores de este último año al frente de su hogar porque para ella la rendición y la claridad de cuentas son un pilar en el ejercicio de la ñorez e indispensables para el proceso transformador que este hogar ha iniciado. Por supuesto, lo hará inspirada en el estilo del apoyo-a-dictadores-de-América-Latina-porque-me-encantaría-ser-uno-de-ellos. Así que esta ñora se sube a su banquito de la cocina y no se pone la banda de ñora, porque es más que obvio que es la ñora.
Antes de iniciar formalmente este acto de rendición de cuentas, esta ñora quiere dejar claro que ella fomenta el diálogo en todo momento, siempre y cuando tanto el ñor como los escuincles, perdón, las bendiciones y hasta las vecinas estén de acuerdo con que la ñora siempre tiene la razón y ella nunca se equivoca. Y esta ñora no tendrá problema alguno en señalar y denunciar públicamente, incluso si alguno de sus escuincles, perdón, bendiciones no está de acuerdo con el plan de transformación que se vive en este humilde hogar.
Una vez que esto quedó claro, esta ñora procede a informar que la falta de aspirinas y omeprazol de la que se ha venido quejando con tan mala saña el ñor no se debe a que esta ñora haya dejado de pedir esos medicamentos. Se debe, en primer lugar, a que la farmacia de siempre, la de toda la vida, ya no es confiable porque cambiaron los rótulos de color, ahora son azules unos y rojos otros, por eso esta ñora sospecha que la corrupción los alcanzó. Por otra parte, esta ñora como no quiere que el ñor siga sufriendo los embates de la gastritis, ya consiguió, que una farmacia cerca de la frontera le surta tanto las aspirinas, como el omeprazol e incluso dos botellas de suero oral a un menor precio.
El único problema pendiente de resolver, pero esta ñora verá cómo lo logra porque ella aspira a darle lo mejor a su familia siempre, es cómo le hacen llegar desde esa población fronteriza (esta ñora se niega a revelar la ciudad exacta porque no vaya a ser que las vecinas argüenderas se aprovechen de esa valiosa información) el paquete. Esta ñora está consciente de que esta operación de traslado se debe hacer muy rápido porque el omeprazol está a punto de caducar y se sospecha que las botellas de suero oral ya lo hicieron.
En otro asunto, esta ñora anuncia que la remodelación del baño que los dueños anteriores del departamento nunca pudieron concretar ya está en marcha y tan en marcha que hace un par de meses se cortó el listón inaugural y se les mostró una imagen de los luchadores que ahora adornan el espejo confirmando la identidad luchona de este hogar. Esta ñora, por eso, no entiende muy bien por qué los escuincles, perdón, las bendiciones siguen sin usar ese inaugurado baño y continúan usando el destinado al uso exclusivo del ñor y la ñora. Esta ñora ya les explicó muy bien cómo equilibrarse para atinarle al hoyo, pero sospecha que los escuincles se acostumbraron a sentarse en un escusado completo y no están mostrando suficiente apego al proyecto transformador de este hogar.
A ese respecto, esta ñora anuncia que el nuevo escusado así como las griferías de la regadera ya se encargaron. Y ante las protestas del ñor porque el costo aumentó en más de 200 por ciento de lo presupuestado, esta ñora aprovecha para aclarar que el presupuesto original no contemplaba algunos equipos como el escusado y las griferías, o sea, sólo contemplaba la renovación de los azulejos y la calcomanía del Santo para el espejo. Pero que quede claro que esta ñora ni de ñorita se quedó con un peso del cambio cuando la mandaban a comprar las tortillas. Así que en este caso nomás fue una especie de confusión breve la que llevó a no considerar esos detalles en el presupuesto original.
Respecto a la plaga de cucarachas de la que se han estado quejando hasta las vecinas mala onda de esta ñora, se informa que esas costumbres barbáricas de querer exterminar a las ratas no van con las metas de la transformación que esta ñora quiere lograr. Es evidente que andar usando trampas y raticidas no es el camino. Por eso, esta ñora propone que tanto en este hogar como en los hogares de los vecinos comencemos un acercamiento con las ratas y les preguntemos cuáles son metas, qué esperan en la vida y cómo podemos lograr que dejen de roer la comida. Esta ñora quiere recordarles que las ratas también son mamíferos, no son cucarachas. De todas maneras, esta ñora seguirá encargando al vigilante del condominio, al que algunos llaman incorrectamente el “poli”, y al que ahora deberán dirigirse como al “mili”, que vigile sin atacar a las ratas y se encargue de darles abrazos cuando sea posible.
Esta ñora podría seguir por horas informando con la veracidad y precisión que la caracteriza, pero ya olió que alguien trajo tamales verdes y ahí está la prioridad. (¿A poco creyeron que a esta ñora le gustaban los de chipilín como al niego-que-mi-partido-esté-partido-nomás-se-pelean-de-cariño? Sino somos iguales).
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