La política de seguridad del país: preparen el show y no detengan a nadie, nomás abrazos a mi persona porque soy bien lindo.
Esta ñora había quedado de verse con otras ñoras, el típico desayuno que las ñoramigas tardan días en cuadrar porque hay que sortear los calendarios sociales de cada una, los de los escuincles, perdón, bendiciones y hasta los de la verificación de la camioneta. Acordar el lugar, es la segunda parte de la negociación porque hay que calcular el tiempo para la recogida de los escuincles, perdón, bendiciones, la pasada al banco, y demás. Total, después de una negociación más complicada que la aprobación del presupuesto en la Cámara de Diputado (que según algunos ya es ilegal), las ñoramigas por fin habíamos logrado acordar día, lugar y hora.
No contábamos con los cierres en Reforma que tendrían a esta ñora a otra de sus ñoramigas paradas por hora y media en Thiers. Finalmente pudimos sentarnos a desayunar/almorzar/brunchear. Es posible que haya sido a consecuencia de la falta de azúcar, pero las ñoramigas empezamos a ver el desfile como una representación perfecta del gobierno actual.
Primero, resulta que el organizador era el mismísimo director del IMSS, sí el mismo que dirige una institución donde la falta de medicinas e instrumental, el retraso en citas, y demás cosas que nadie dice que empezaron ahora, se han agravado. O sea, en el IMSS se encargan del circo a falta de pan (las ñoras devoramos el de la canasta no bien llegó). Es la política de salud de este gobierno: montas hasta un tren en el Zócalo, pero no hay vacunas de sarampión desde hace meses.
Después, no se hizo el día de descanso que fue el lunes, porque resulta que eso de correr los días de puente a los lunes es una trampa neoliberal que quiere que los mexicanos olviden su pasado y se promueva el turismo interno que nada más los lleva a gastar y hacer crecer la economía local de ciertos lugares. O sea, las lecciones de historia harán avanzar más a este país según el me-creo-historiador-pero-confundo-a-la-esposa-de-Juárez-con-la-de-Porfirio. Es la política educativa de este país, nada que sirva en el mundo real, sólo en el de las ideas.
El evento nuevamente demuestra que el trabajo productivo debe ser interrumpido de cualquier forma y obstaculizar a los que pagan impuestos, aunque de todas formas use esos impuestos para mantener a gente que no trabaja y puede ver el desfile. Esa es la política laboral de este gobierno.
El evento se percibió como una cosa más bien privada, con unos cuantos invitados especiales, con transmisión desde el ¡canal personal del les-vengo-ofreciendo-mi-nuevo-libro-porque-Beatriz-ya-dijo-que-con-mi-aguinaldo-no-alcanza-para-los-regalos-de-Navidad! Nada de usar el canal de presidencia, si era su evento particular donde las fuerzas armadas exhibieron sus habilidades para que su comandante en jefe que ni siquiera hace el saludo militar, que no saluda a la bandera y que no canta el himno nacional tuviera su desfile. Así la política de seguridad del país: preparen el show y no detengan a nadie, nomás abrazos a mi persona porque soy bien lindo.
Las ñoramigas comentaron la cuestión de los disfraces tipo de la “asamblea escolar” que se usaron para hacer los “cuadros históricos”. Con su experiencia, este grupo de ñoras llegó a la conclusión que se fueron hechos por las mamás de cada soldado-bendición que participó, ¿o no? Seguro que el enorme libro de que era una Constitución fue hecho por un grupo de alumnos voluntarios en la secundaria X de San Juan y San Jorge de los Gansos Voladores. Porque con la política de austeridad de este gobierno sería impensable que se gastaran millones.
Las ñoramigas sí echaron un poco en falta a los deportistas o figuras de la cultura que destacaban por su participación en otros lejanos desfiles de la época neoliberal. Pero así la política de este gobierno apuntalar todo lo militar, mientras se proclama la paz, pero se ahorra y mucho en cultura y deporte.
En el balcón presidencial la única invitada era la cada-día-me-veo-más-demacrada-y-sin-amor que ocupa el puesto de jefa de gobierno de la ciudad. Es muy claro que el puesto estratégico era por la afición que ella tiene por la escoba. ¿O quién iba a limpiar el rastro que queda luego de un desfile con dos mil caballos? Es la política de limpieza y de empoderamiento femenino de este gobierno.
Finalmente, la imagen que trascendió fue la del jinete tratando de hacer un truco acrobático y que acaba dando un ganzaso espectacular. Ni la ñora ni sus amigas pueden agregar nada más.
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