El sexenio de Stranger Things

Se espera que el nuevo plan de estudios de la SEP tenga tanto éxito como ha tenido el Gas Bienestar, el aeropuerto militar Felipe Ángeles y el plan para bajar la inflación.



En esas cosas que las ñoras hacemos para convivir con nuestros escuincles-pubertos, perdón, con nuestras bendiciones que llegan a la edad de la punzada pues está buscar actividades. Ver la serie de Stranger Things resultó una de ellas. Es verdad, no es mucha actividad en realidad; pero sirvió y repasamos así todas las temporadas.

Esta ñora no pudo evitar pensar que el sexenio actual tiene bastante en común en Stranger Things y no porque se ubique en los años ochenta (y más allá) que es a donde insiste en mandarnos el llamo-señor-a-un-capo-del-narco-pero-insulto-a-cualquier-ciudadano-que-no-esté-de-acuerdo-conmigo. Es que en este sexenio todo parece ocurrir en un mundo paralelo, oscuro y subterráneo donde reina el mal, hay tentáculos largos que buscan estrangularnos y todo está cayéndose por la podredumbre.

En este oscuro submundo hay cada vez menos rendición de cuentas, se ha buscado de todas las maneras posibles ocultar la información de los contratos. En lugar de que involucrar vía licitación a más empresas no sólo para obtener precios más competitivos, sino para que más empresas tengan oportunidad de ser proveedores del gobierno cada año hay menos licitaciones y más asignaciones directas. O sea, justo al revés de lo que se supone debería pasar.

El combate a la corrupción que se supone era el proyecto estrella y la razón que llevó a muchos babosos, perdón, a muchos bien intencionados mexicanos a votar por el soy-tan-buen-socialista-que-mi-hijo-mayor-anda-de-vip-en-todas-partes también cayó en ese oscuro mundo subterráneo. A casi cuatro años de haber iniciado el asunto de cancelar el aeropuerto de Texcoco porque era un volcán de corrupción que iba a acabar con el lago imaginario pero ancestral, pues no hay ni un solo detenido, proceso abierto o algo semejante.

El mismo maleficio le cayó al proyecto de dar a conocer a los responsables de los malos manejos de los fideicomisos, a la fecha no hay nada. Eso sí, esta ñora se reía un poco cuando leía que los actores y productores que confiaron y hasta promovieron que llegara este gobierno pues ya difundieron una carta reclamando que cumplan las promesas de sí darles dinero aunque se hubieran chutado los fideicomisos. Esos fideicomisos la verdad es que les servían mucho a esos cineastas (algunos para hacer bodrios) y lo mejor era que una parte de las ganancias regresaba a ese fideicomiso para que otros cineastas siguieran filmando. Por ejemplo, según leyó esta ñora de la famosa No hay devoluciones de Eugenio Derbez que fue súper exitosa pues metió mucho dinero… y ese dinero seguro acabó financiando al Tren Maya que está acabando con la selva. O sea, muy Stranger Things.

Por cierto que uno de esos tentáculos que Vecna usa para atrapar a aquellos que entran en el submundo lo extendió esta semana el exrockstar de la pandemia, o sea, el Doctor Muerte cuando amenazó con la desaparición de los consultorios de las farmacias. Esta ñora ahí sí sintió como que le hervía la sangre, casi usa eso de “eso sí calienta” que tanto le gusta al como-los-abrazos-no-son-suficientes-voy-a-hacer-mañaneras-los-sábados. Es que esos consultorios sí han sacado del apuro a esta ñora varias veces, como cuando para entrar a la secundaria le pidieron al escuincle-puberto, perdón, a la bendición un certificado médico. Esta ñora no iba a pagar la consulta con el pediatra (sí esta ñora lleva a sus bendiciones a pediatra privada porque el IMSS es muy complicado) para eso. Y a la comadre de esta ñora, una vez ahí le curaron una cortadota que se hizo tratando de picar cebolla estilo Máster Chef. De verdad que en este gobierno oscuro no sólo les encanta hacer todo mal, sino también quieren acabar con las salidas a los problemas que los mexicanos vamos creando.

O por lo menos en algunos aspectos, porque esta ñora ve que la oscuridad de ese mundo paralelo está llegando muy pero muy feo a todo lo que tiene que ver con la educación. Es tan raro lo que ocurre que ahora la SEP va a promover una educación que vaya en contra de la ciencia, ¡de la ciencia! El nuevo programa va contra la cultura “eurocéntrica, científica y patriarcal”. La verdad es que en lo de eurocéntrico no hay mucha novedad, porque por lo menos a esta ñora le enseñaron en la escuela que la Colonia duró tres siglos y ya… así nada más. Nada de lo que pasó en esos tres siglos que son los más “eurocéntricos”. Lo único que esta ñora espera, como algunos optimistas dicen, es que este nuevo programa tenga tanto éxito como ha tenido el Gas Bienestar, el aeropuerto militar Felipe Ángeles y el plan para bajar la inflación.

Esta ñora anda optimista, sin duda, y ya espera con ansias la quinta temporada de Stranger things donde seguro acabarán sellando el acceso al mundo subterráneo y matarán a Vecna de una vez por todas. Y esta ñora alberga la ilusión de que al acabar este sexenio, los mexicanos logremos hacer lo mismo. Esta ñora está consciente de que es una ilusión… pero se vale soñar.

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* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com

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